Apuestas
Algunos empresarios echan de menos a Uni¨®n Valenciana m¨¢s que sus propios votantes. A menudo lamentan su desaparici¨®n del ¨¢mbito parlamentario, y sobre todo de las instituciones que ocuparon, y convierten las sobremesas de los reservados de ciertos restaurantes en velatorios donde la aflicci¨®n alcanza una gran calidad de destilado. Y no porque el programa de esta organizaci¨®n, que atraviesa horas bajas acaso hacia su extinci¨®n total, satisficiera sus necesidades pol¨ªticas, sino porque le pod¨ªan sacar mucho jugo empresarial al partido en unas coyunturas en las que decantaba mayor¨ªas y ten¨ªa la ¨²ltima palabra en las Cortes. Tanto que incluso hubo un empresario de Castell¨®n que en las pasadas elecciones auton¨®micas pretendi¨® financiar ¨¦l solito, ante la indignaci¨®n del resto de jugadores, la campa?a de este partido para, llegado el caso, poder engullir toda la torta de un mordisco. A Uni¨®n Valenciana tampoco le ven¨ªa mal esta presi¨®n, que alcanza a cualquier organizaci¨®n pol¨ªtica con posibilidades en v¨ªsperas electorales y que ha llegado a desarrollar recaudadores muy profesionales. Aunque esa correspondencia casi siempre deja la cuneta llena de cad¨¢veres. Ahora se trata de empresarios que han quedado al margen de las contratas p¨²blicas, de las privatizaciones de las ITV o del gas, del reparto de Terra M¨ªtica y su anillo, de la obtenci¨®n de licencias de obra y de otros pasteles que s¨®lo se zampa el selecto y voraz c¨ªrculo habitual. En cierto modo, la cu?a de Uni¨®n Valenciana frenaba al PP y propiciaba un reparto que, siendo arbitrario por sistema, pod¨ªa resultar m¨¢s equitativo. Pero la mayor¨ªa absoluta redujo dr¨¢sticamente este margen de maniobra. Por eso ahora, a punto de cumplirse el segundo aniversario de su cat¨¢strofe en las urnas, a?oran a Uni¨®n Valenciana. Sin embargo, varios de estos empresarios ya se consuelan mirando hacia el Bloc Nacionalista Valenci¨¤, partido que determinados or¨¢culos engordan con su propio eco para reemplazar a Uni¨®n Valenciana en aquella situaci¨®n de bisagra. Han decidido ponerle unas velas y est¨¢n dispuestos a derramar m¨¢s l¨¢grimas que su electorado si fuera necesario. Porque en el fondo s¨®lo se trata de un juego.
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