Un relato real
Javier Cercas recrea en 'Soldados de Salamina' el fusilamiento de S¨¢nchez Mazas al final de la guerra civil
Son Maria, Pere, Joaquim y Daniel: los 'amigos del bosque'. Con su testimonio de unos hechos que ocurrieron hace m¨¢s de 60 a?os, en los ¨²ltimos d¨ªas de la guerra civil, Javier Cercas ha escrito Soldados de Salamina (Tusquets, 2.000 pesetas), 'un relato real, un relato amasado con hechos y personajes reales, un relato centrado en el fusilamiento de Rafael S¨¢nchez Mazas'.
En julio de 1994, cuando supo de su frustrado fusilamiento en el monasterio de Santa Maria del Collell, cerca de Banyoles (Girona), Rafael S¨¢nchez Mazas era para Javier Cercas poco m¨¢s que 'el nombre brumoso de uno de los muchos pol¨ªticos y escritores falangistas que los ¨²ltimos a?os de la historia de Espa?a hab¨ªan enterrado aceleradamente'. Cuatro a?os y medio despu¨¦s, en febrero de 1999, una carta que recibi¨® como respuesta a un art¨ªculo publicado en la edici¨®n catalana de este diario puso a Cercas sobre la pista de unos personajes a los que Rafael S¨¢nchez Ferlosio ya hab¨ªa aludido cuando le cont¨® la novelesca peripecia vivida por su padre: los 'amigos del bosque', curiosamente desertores del ej¨¦rcito republicano, que lo alimentaron y lo protegieron hasta la llegada de los nacionales.
El autor de la carta, el historiador Miquel Aguirre, 'un individuo jovenc¨ªsimo y de aire resacoso (o quiz¨¢ exc¨¦ntrico)', como pudo comprobar Cercas m¨¢s tarde, le habl¨® de Jaume Figueres, de 67 a?os, concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Cornell¨¤ de Terri -cerca de Banyoles-, y ¨¦ste, a su vez, le habl¨® de su padre, Pere, ya fallecido, y de su t¨ªo Joaquim, de Daniel Angelats y de Maria Ferr¨¦. Para entonces, la historia de S¨¢nchez Mazas ya se hab¨ªa convertido para Cercas 'en una de esas obsesiones que constituyen el combustible indispensable de la escritura'.
Cuando visit¨® a Maria Ferr¨¦, Cercas encontr¨® a una mujer 'm¨ªnima y dulce, digresiva, de ojos alternativamente maliciosos y humedecidos por su incapacidad para sortear las trampas que en el curso del relato le tend¨ªa la nostalgia'. En Angelats, que acababa de sobrevivir a un infarto, encontr¨® a 'un hombre moroso y disminuido, cuyos gestos, de una solemnidad casi abacial, contrastaban con la inocencia pueril de muchas de sus observaciones y con la despaciosa humildad de su talante de peque?o empresario catal¨¢n'. Y, en fin, en Joaquim Figueres encontr¨® a un tipo 'alto y fornido, de aire casi juvenil, un hombre viajado y provisto de una desaforada vitalidad y de una conversaci¨®n erupcionada de exclamaciones y risotadas'. Con lo hablado con los 'amigos del bosque', lo hallado en m¨²ltiples lecturas y lo escuchado en numerosas entrevistas, Cercas traza en su libro un soberbio retrato del 'primer fascista de Espa?a', 'el m¨¢s atendido consejero de Jos¨¦ Antonio', 'el principal ide¨®logo y propagandista' de la Falange. Un retrato, en definitiva, de 'aquel hombre culto, melanc¨®lico y conservador, hu¨¦rfano de coraje f¨ªsico y al¨¦rgico a la violencia, sin duda porque se sab¨ªa incapaz de practicarla, que durante los a?os veinte y treinta hab¨ªa trabajado como casi nadie para que su pa¨ªs se sumergiera en una salvaje org¨ªa de sangre'. Pero el 'relato real' de Cercas quiz¨¢ nunca habr¨ªa sido escrito sin el concurso de Miralles, el personaje que protagoniza la ¨²ltima parte del libro, tal vez el miliciano que tras el frustrado fusilamiento salv¨® la vida de S¨¢nchez Mazas, pero ¨¦sa, dir¨ªa Cercas, es otra historia.
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