Dos osos matan y descuartizan a su cuidador en un parque recreativo de ?lava
Uno de los animales hab¨ªa atacado en las mismas instalaciones a una turista en 1999
El suceso se desarroll¨® en el parque Educativo del Ebrosituado en la localidad alavesa de Sobr¨®n, a 40 kil¨®metros al sur de Vitoria. Unos trabajadores que fueron avisados del ataque intentaron separar a Aresti de sus agresores, sin lograrlo. Al lugar se desplazaron varias ambulancias de la localidad cercana de Espejo y del Servicio Vasco de Salud-Osakidetza cuyos componentes trataron de reanimar a la v¨ªctima sin conseguirlo.
Seg¨²n inform¨® ayer la polic¨ªa vasca, fue un vecino el que acab¨® con varios disparos con los animales para que los miembros de los servicios sanitarios pudiesen hacer su labor. Sin embargo, para entonces s¨®lo les quedaba certificar la defunci¨®n de Aresti.
Las instalaciones donde ocurri¨® el incidente est¨¢n en el mismo espacio natural que salt¨® a los medios de comunicaci¨®n en 1999 cuando uno de los animales que ayer acabaron con la vida de Aresti atac¨® a una turista alicantina y le provoc¨® unos desgarros que obligaron a la amputaci¨®n de una pierna. El incidente tuvo lugar entonces cuando la mujer se acerc¨® junto a su marido y uno de sus hijos a la jaula de los dos animales, situada en la parte posterior del parque-hotel de Sobr¨®n, donde los plant¨ªgrados permanec¨ªan desde 1993 procedentes del centro de recuperaci¨®n de animales de Cangas de On¨ªs.
La mujer fue atacada por uno de los osos cuando introdujo un pie entre los barrotes, lo que hizo que uno de los osos se abalanzara sobre ella y se lo mordiera. En dicho centro tur¨ªstico, adem¨¢s de los dos plant¨ªgrados, se encuentran otros muchos animales en unas condiciones por las que la Diputaci¨®n Foral de ?lava ha abierto expedientes y ha impuesto varias multas.
Aresti, un naturalista conocido en la provincia por sus iniciativas en defensa de la fauna local, gestionaba desde hac¨ªa diez a?os este parque. Desde su apertura, colectivos ecologistas y vecinos hab¨ªan denunciado el mal estado de conservaci¨®n del centro en el que se mezclaban diversas especies.
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