Antonia San Juan cierra en el Alfil su gira de mon¨®logos sobre mujeres
Vuelve a casa con la maleta teatral atiborrada de mon¨®logos -una docena larga- firmados por F¨¦lix Sabroso y Enrique Gallego, mayormente, pero tambi¨¦n por la protagonista, e incluso por Federico Garc¨ªa Lorca (el de Do?a Rosita la Soltera). Los programadores alaban 'el ritmo trepidante, los textos ¨¢giles y divertidos y la extraordinaria combinaci¨®n de comedia y drama' del montaje, que devuelve a Antonia San Juan la comunicaci¨®n directa con el p¨²blico.
'Una vez hecho el balance, estoy content¨ªsima, y eso que cuando me plante¨¦ volver a hacer teatro sent¨ª alg¨²n recelo', reconoce la actriz. 'Regresar a Madrid es poner un gran cierre a la gira y, aunque el espect¨¢culo es m¨¢s de lo mismo en lo esencial, tiene nuevos matices', a?ade. En estos meses ha experimentado las reacciones del p¨²blico: 'Improviso y, si gusta, lo dejo como parte del mon¨®logo'.
La actriz reivindica la risa, que no el chiste f¨¢cil. 'Los textos transmiten una gran carga sat¨ªrica con ese contenido humano y social del que estamos un poco hu¨¦rfanos; hay que re¨ªrse y olvidar lo nerviosos que estamos siempre'. Sus convidadas teatrales son casi siempre pasto del fracaso o, cuando menos, mujeres en apuros. San Juan va hilando historias sin parar y sin m¨¢s compa?¨ªa que la mirada c¨®mplice del p¨²blico.
Para abrir boca, se transmuta en una actriz secundaria que achaca sus incontables males a la gente que la rodea. Despu¨¦s, presenta un tele-empleo peculiar, narra la aventura 'terrible' de Renata y su mascota y se vuelca en la historia de Present, una mujer carcomida por el alcohol (sustitutivo del marido que le dio portazo) y enamorada de la venta de productos de alta cosm¨¦tica para el hogar. Otros personajes que desfilar¨¢n por el Alfil ser¨¢n una f¨¦mina esquiva a un tel¨¦fono m¨®vil pegada (que nunca suena), una tal Pili, que presume de ser 'la m¨¢s guapa, lista, sexy y divertida', y la mencionada Rosita, lorquiana y solterona.
Otras mujeres. Teatro Alfil. Pez, 7. Metro Callao. De 2.000 a 2.500 pesetas.
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