El ELN colombiano secuestra a 27 trabajadores de la petrolera norteamericana Oxy

Colombia empez¨® la semana de Pascua en medio de tensiones generadas por fricciones entre el Ejecutivo y sus militares por la barbarie de sendas masacres de la guerrilla y los paramilitares. Referente a esta ¨²ltima, el Defensor del Pueblo acus¨® al Estado de no haber hecho nada para evitarla cuando era "una masacre anunciada". Las tensiones se han debido tambi¨¦n a un secuestro de 27 trabajadores, la mayor¨ªa subcontratistas de la multinacional norteamericana Oxy por parte del Ej¨¦rcito de Liberaci¨®n Nacional (ELN).

En un en¨¦rgico discurso, el presidente colombiano, Andr¨¦s Pastrana, pidi¨® el pasado lunes a sus oficiales "lealtad", "discreci¨®n" y "sinceridad", y les record¨® que las fuerzas militares no son deliberantes. La rega?ina se produjo dos semanas despu¨¦s de que el comandante del Ej¨¦rcito, Jorge Enrique Mora, se "destap¨®", seg¨²n rese?¨® la prensa, y critic¨® duramente la posibilidad de un intercambio humanitario que permita la libertad de presos de la guerrilla enfermos por parte de los miembros de la fuerza p¨²blica de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).

Acusaciones

Pastrana habl¨® de los paramilitares. Dijo que estos grupos "mancillan a diario el honor de la tropa" y deben ser combatidos porque son "criminales desalmados". "Cada acci¨®n de un grupo de estos s¨®lo logra poner en entredicho nuestra eficiencia", dijo, y envi¨® un mensaje a quienes los apoyan: "No hay error m¨¢s grande que creer que se puede alcanzar el cielo apoy¨¢ndose en los hombros del diablo".

Los altos mandos, reunidos en la celebraci¨®n de los 50 a?os del Comando General de las Fuerzas Militares escucharon en silencio la rega?ina de Pastrana, pero en voz baja dejaron ver su malestar. Los medios especularon sobre la inminente dimisi¨®n del general Mora. Antonio Navarro, ex guerrillero y hoy congresista, y uno de los que m¨¢s ha trabajado por sacar adelante el proceso con el ELN no cree que se den cambios en la c¨²pula. "Me gust¨® el discurso. Pero me pregunto: ?Va a producir un efecto diferente al de fijar una posici¨®n? No creo que renuncie ninguno".

La fricciones de militares y Gobierno por la pol¨ªtica de paz no es nueva. Se inici¨® desde la orden de despeje de los 42.000 kil¨®metros cuadrados para los di¨¢logos con las FARC y tuvo su momento m¨¢s cr¨ªtico en mayo de 1999, cuando este despeje gener¨® la renuncia del ministro de Defensa. El discurso lo pronunci¨® Pastrana en un lunes de Pascua especialmente cargado de noticias de guerra. A las cinco de la tarde, el ELN secuestraba a unos l00 trabajadores subcontratistas de la compa?¨ªa norteamericana Oxy que regresaban a sus casas en Arauca, capital de la provincia del mismo nombre, al noreste del pa¨ªs. Ayer manten¨ªan a 27 en su poder. Una fuente de la multinacional dijo a EL PA?S que se trata de trabajadores oriundos de la regi¨®n que trabajan en Ca?o Lim¨®n, el mayor yacimiento petrolero del pa¨ªs, como celadores, limpiadores y empleados de cafeter¨ªa. S¨®lo dos de los rehenes trabajan como t¨¦cnicos de manera directa con Oxy. La producci¨®n en Ca?o Lim¨®n esta paralizada desde el pasado mes de febrero por los sistem¨¢ticos atentados del ELN, que pasan este a?o de 60.

Escenario de di¨¢logo

No se sabe a¨²n qu¨¦ pretenden los elenos: si extorsionar a Oxy o presionar al Gobierno en momentos en que la posibilidad de adelantar un proceso de paz est¨¢ en punto muerto por la presencia de los paramilitares en la zona donde se esperaba definir el escenario para el di¨¢logo.

Ese mismo lunes los colombianos se enteraron, a cuentagotas, c¨®mo las v¨ªctimas de las masacres de Semana Santa de paramilitares en caser¨ªos de la regi¨®n de Naya -entre las provincias de Cauca y Valle- y la de las FARC -en un caser¨ªo de Antioquia- aumentaban a medida que pasaban las horas. En el primer caso, los muertos pasan de 40; en el segundo caso se habla de un total de 28. El defensor del Pueblo colombiano, Eduardo Cifuentes, responsabiliz¨® al Estado de la muerte de campesinos e ind¨ªgenas en la masacre paramilitar. Cifuentes dijo que el presidente hab¨ªa sido alertado sobre la posibilidad de este crimen y no se hizo nada para impedirlo, "la mayor¨ªa de las masacres son anunciadas". Pidi¨® al Gobierno cambiar la estrategia militar "debe ante todo apuntar a la protecci¨®n de la poblaci¨®n civil" y se mostr¨® conmovido por la barbarie y la degradaci¨®n del conflicto que muestran "la hondura del la tragedia que vive el pueblo colombiano".