Cerca de 800 colombianos han muerto este a?o v¨ªctimas de la violencia
La cifra duplica el n¨²mero de v¨ªctimas del mismo periodo de 2000
'Al menos 784 colombianos han sido asesinados en 145 matanzas en lo que va corrido de este a?o'. Esta cifra, dada por Fernando Medell¨ªn, cabeza de la Red de Solidaridad -oficina estatal encargada de atender a los desplazados-, muestran que la barbarie que vive este pa¨ªs ha desbordado, en estos tres meses y medio de 2001, todo horror imaginable. Antes de que los periodistas salieran de su asombro, Medell¨ªn agreg¨®: 'Casi duplica a las v¨ªctimas registradas el a?o pasado en el mismo periodo, que fueron 442'.
De estos colombianos, 544 han muerto, de manera salvaje, en 87 matanzas perpetradas por fuerzas paramilitares contraguerrilleras. Los grupos guerrilleros, Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), son responsables de 24 muertes, y al Ej¨¦rcito de Liberaci¨®n Nacional (ELN) se le atribuyen 36 muertos.
Las estad¨ªsticas incluyen los muertos que dej¨® el ataque feroz de las FARC el domingo de Pascua a La Caucana, caser¨ªo de Taraz¨¢, provincia de Antioquia. Ejecutaron civiles - se habla de 28-, quemaron casas, arrasaron el comercio. 'Yo sal¨ª a auxiliar a un herido. Pero los guerrilleros me frenaron, y ah¨ª, delante de m¨ª, le dispararon a uno y al otro lo remataron. Dijeron que eso les pasaba por ser de las autodefensas ', cont¨® el cura p¨¢rroco.
Las cifras incluyen tambi¨¦n la ¨²ltima matanza paramilitar, en pleno Jueves y Viernes Santo, en la regi¨®n del Alto Naya, una zona de monta?as entre las provincias de Cauca y Valle, que del otro lado le da la cara al Pac¨ªfico.
'Hemos vuelto a los peores tiempos de la barbarie', dijo conmovido el defensor del Pueblo, Eduardo Cifuentes, luego de constatar que los matones, con sus brazaletes de AUC -Autodefensas Unidas de Colombia-, usaron motosierras y cuchillos para despedazar a sus v¨ªctimas, campesinos e ind¨ªgenas desarmados. Se sabe que los muertos pasan de 50.
Y fue el Defensor el primero en recordar que ¨¦sta fue, como la mayor¨ªa de las veces, una 'masacre anunciada'. Varias entidades hab¨ªan dado la voz de alerta desde diciembre pasado. El 2 de abril, el Comit¨¦ Interamericano de Derechos Humanos de la OEA le pidi¨® al Estado colombiano la adopci¨®n de 'medidas urgentes para preservar el derecho a la vida' a los habitantes de la zona.
Fernando Medell¨ªn dice que existe una 'alta correlaci¨®n' entre la presencia paramilitar en el Alto Naya y sus ataques 'salvajes', con las acciones del ELN contra la sociedad de Cali -capital de la provincia del Valle-, en concreto, los secuestros m¨²ltiples de feligreses de una iglesia y de comensales de varios restaurantes de carretera.
Y recoge la preocupaci¨®n que sienten muchos hoy en este pa¨ªs, porque la sociedad colombiana es cada vez m¨¢s proclive a dar su apoyo a los paramilitares. 'Es necesario que la sociedad deje de ver con cierta simpat¨ªa y cierta tolerancia a esto criminales', dijo hace poco el fiscal Alfonso G¨®mez.
'La intensidad y recurrencia de las acciones paramilitares contra la poblaci¨®n civil, lejos de debilitarse, se incrementaron, sin que se hayan visto confrontadas por una acci¨®n gubernamental que les ponga freno', dice el reciente informe de la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, presentado la semana pasada en Ginebra.
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