El grupo Al Tall celebra sus 25 a?os con un concierto en Barcelona
Vicent Torrent, su fundador, dice que el catal¨¢n retrocede en Valencia
La ciudad se llenar¨¢ hoy de libros y rosas, y las escalinatas de la catedral barcelonesa ofrecer¨¢n una propuesta algo diferente: el grupo valenciano Al Tall celebrar¨¢ sus primeros 25 a?os de vida profesional. En el concierto gratuito que se celebrar¨¢ a las siete de la tarde, Al Tall contar¨¢ con la ayuda de una banda sinf¨®nica de 100 instrumentistas.
El repertorio del concierto que llevar¨¢ al grupo valenciano hasta la catedral de Barcelona se basar¨¢ en el reciente disco 25 anys en directe, en el que Al Tall ha recuperado alguna de sus composiciones m¨¢s emblem¨¢ticas con la ayuda de una banda sinf¨®nica. 'En el a?o 2000 se cumpl¨ªan los 25 a?os de Al Tall y quisimos celebrarlo de una forma diferente: nunca hab¨ªamos actuado con una banda sinf¨®nica y, lo que aun es m¨¢s raro, nunca hab¨ªamos grabado un disco en directo; as¨ª que pensamos que ser¨ªa una buena ocasi¨®n de juntar ambas cosas', explica Vicent Torrent, cofundador de Al Tall con Manuel Miralles.
El repertorio escogido por Al Tall para adaptarlo a la sonoridad de la banda se centra en la cantata Quan el mal ve d'Almansa, adem¨¢s de varios temas ya cl¨¢sicos, como Tio Canya y Les penes s¨®n. 'La primera vez que las interpretamos en directo pudimos comprobar que el p¨²blico se emocionaba', recuerda Torrent. 'En Valencia una banda sinf¨®nica es algo muy serio, muy arraigado y, seg¨²n como se mire, conservador, un poco carca. As¨ª que o¨ªr canciones de lucha, de resistencia, con esa sonoridad y un director dirigiendo con batuta fue para muchos impactante. Adem¨¢s de la cuesti¨®n sonora hab¨ªa un rollo social muy interesante y la percepci¨®n que tuvimos todos de que estas canciones pod¨ªan alcanzar un plano m¨¢s p¨²blico. No fue algo pretendido, surgi¨® espont¨¢neamente'.
Renovar las bandas
El trabajo de Al Tall con una banda no ha sido hist¨®ricamente el primero, pero experiencias parecidas pueden contarse con los dedos de una mano. 'Las bandas y sus seguidores forman un mundo muy cerrado. Para ellos West Side story es el colmo de la modernidad, y cuando se habla de m¨²sica popular se quedan en bailes tradicionales, pero nunca han entrado en el mundo del folk. No creo que nuestro trabajo sea una revoluci¨®n, pero ha servido para demostrar que una banda puede tocar otras cosas adem¨¢s de Una noche en el Monte Pelado'.
Al Tall no ha rescatado para estas actuaciones temas como Tio Canya, centrado en la problem¨¢tica ling¨¹¨ªstica valenciana, sino que son canciones que nunca ha dejado de cantar. 'Escrib¨ª Tio Canya hace 23 a?os, pero la volver¨ªa a escribir ahora', afirma Vicent Torrent. 'Lo que explica la canci¨®n era tan evidente que hasta result¨® raro que nadie la hubiera escrito antes. La situaci¨®n no es exactamente igual, pero las diferencias idiom¨¢ticas entre las distintas generaciones siguen presentes. En el Pa¨ªs Valenciano se han ido ganado cosas en el terreno de la verg¨¹enza ling¨¹¨ªstica, pero son pasos de goma que igual se alargan como se acortan. Parec¨ªa que hab¨ªan desaparecido todas las humillaciones que sufr¨ªa el Tio Canya por hablar en catal¨¢n, pero est¨¢n regresando. Pens¨¢bamos que eran batallas ganadas, pero simplemente eran pasos adelante que ahora se est¨¢n desandando. Como dec¨ªa Raimon, quan creus que ja s'acaba, torna a comen?ar'. Torrent utiliza en todo momento la palabra catal¨¢n para referirse al idioma hablado en la Comunidad Valenciana. 'Soy totalmente consciente y en Valencia se sabe que los de Al Tall somos conscientes, pero en los ¨²ltimos tiempos no nos ha causado grandes problemas. En Valencia el retroceso de la pol¨ªtica ling¨¹¨ªstica, sobre todo en el terreno de la educaci¨®n, se vive a diario. Da la impresi¨®n de que todo va hacia atr¨¢s, aunque en nuestro caso nos afecta poco: incluso nos contratan ayuntamientos del PP'.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.