El rasero de Javier P¨¦rez Royo
El pasado d¨ªa 22 de abril en EL PA?S apareci¨® publicado un art¨ªculo de opini¨®n del se?or Javier P¨¦rez Royo en el que bajo el t¨ªtulo de Crisis terminal, se permite el lujo de analizar la situaci¨®n interna del Partido Andalucista. Como militante de este partido, no puedo permanecer callado ante lo que considero, cuando menos, desatinos de dicho art¨ªculo.
Si no fuera porque este se?or es catedr¨¢tico de Derecho Constitucional, pensar¨ªa que desconoce totalmente c¨®mo funciona un partido pol¨ªtico. Si no fuera porque creo en la autonom¨ªa universitaria, pensar¨ªa que es uno m¨¢s de esos voceros que los partidos centralistas tienen a sueldo para lanzar infundios sobre aquellos que disentimos del pensamiento ¨²nico, sobre los que vamos a contracorriente.
Pero como creo en el ser humano, como creo que la buena fe se presume, no pienso ninguna de estas cosas. Quiero creer, m¨¢s bien, que este se?or ha cometido una grave equivocaci¨®n, provocada, en parte, por las confusas noticias aparecidas en determinados medios de comunicaci¨®n, no siempre bienintencionados.
En el Partido Andalucista no hay crisis alguna. El Partido Andalucista lleva garantizando la gobernabilidad en las instituciones mucho tiempo, tanto en el Parlamento de Andaluc¨ªa como en multitud de ayuntamientos y diputaciones provinciales donde estamos presentes. En general, all¨¢ donde los ciudadanos han depositado la confianza en nosotros, hemos demostrado que estamos en las instituciones para gobernar, para transformar la realidad, que es, en definitiva, para lo que est¨¢n los partidos pol¨ªticos.
El hecho de que algunos elementos aislados protagonicen actitudes grotescas en determinadas instituciones concretas no descalifica al Partido Andalucista, los descalifica a ellos. Lo que s¨ª es cierto es que hay otros partidos pol¨ªticos que s¨ª tienen actitudes contradictorias, que s¨ª ponen en peligro el buen funcionamiento de las instituciones.
No es comprensible, por ejemplo, que el Grupo Socialista en el Parlamento andaluz se niegue a votar un recurso de inconstitucionalidad (en este caso sobre la Ley de Extranjer¨ªa) en la C¨¢mara y que, dos d¨ªas despu¨¦s, el presidente de la Junta de Andaluc¨ªa (que es secretario general del PSOE de Andaluc¨ªa, ?oh, sorpresa!) proponga este mismo recurso en el Consejo de Gobierno. Eso s¨ª que es confundir a los ciudadanos. O cuando el alcalde de Sevilla no se pone de acuerdo con su propio grupo municipal y la direcci¨®n provincial del PSOE sobre c¨®mo llevar la pol¨ªtica en la ciudad que gobierna. Eso s¨ª que provoca inestabilidad. O cuando el PSOE de Andaluc¨ªa pide que el submarino Tireless se vaya de aguas andaluzas y los eurodiputados del PSOE votan en Europa cosas muy distintas. Eso ya es enga?ar con descaro.
Se?or P¨¦rez Royo: ejerza el derecho a la cr¨ªtica, que es sano; sea cruel con los partidos pol¨ªticos, que para eso est¨¢n; pero, por favor, lea, inf¨®rmese y, sobre todo, use el mismo rasero para todos. Nos lo hemos ganado.
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