El triunfo a pesar de Limp Bizkit
El domingo por la ma?ana concluy¨® la quinta edici¨®n de un Festimad que este a?o 2001 ha reunido a m¨¢s de 27.000 personas para ver a m¨¢s de cincuenta artistas en directo. Inevitablemente, la de este a?o ser¨¢ recordada por la ausencia de uno de sus grupos estrellas, los norteamericanos Limp Bizkit, quienes, haciendo una lectura interesada del contrato firmado, prefirieron 'quedar mal con sus fans antes que hacer peligrar la vida de uno de ellos', seg¨²n manifest¨® su manager a los responsables de su casa de discos.
Eso s¨ª, cobraron por adelantado una parte de lo estipulado y no dieron opci¨®n alguna a la soluci¨®n del conflicto, con lo que su imagen de estrellas qued¨® empa?ada por su comportamiento en la rueda de prensa -hicieron esperar a los periodistas espa?oles una hora y media y su cantante, Fred Durst, exhibi¨® aires de diva barata con tintes de macarra yanki- y exigente hasta el delirio en el recinto del concierto, provocando incomodidades, retrasos en el horario y la desilusi¨®n de los fans, que en gran n¨²mero se hab¨ªan desplazado desde todos los puntos del pa¨ªs para contemplar su actuaci¨®n en Espa?a.
Por el lado de la organizaci¨®n, su conciencia quedaba limpia, ya que pusieron el m¨¢ximo de su parte para solucionar el problema planteado y, adem¨¢s, mostraron un documento firmado por dos arquitectos y un ingeniero en los que se aseguraba que las vallas de seguridad colocadas cumpl¨ªan con los requisitos 'de forma y dimensi¨®n' solicitados por los representantes del grupo v¨ªa fax el 9 de febrero de este a?o.
Sin concesiones
En cuanto al devenir del festival en su ¨²ltima jornada, algunos de los grupos que actuaban hicieron referencia durante su actuaci¨®n al comportamiento de los de Florida. As¨ª, el cantante de Zen Guerrilla bromeaba ante la audiencia diciendo que los Limp Bizkit estaban ya contando los billetes y tom¨¢ndose una copa a la salud de los espectadores. El mismo manager de los neoyorquinos Biohazard, grupo que se ofreci¨® voluntariamente a repetir actuaci¨®n para que el festival no se quedara cojo en sus horas cruciales, propuso que se le grabara en v¨ªdeo afirmando que los Bizkit eran unos ni?atos -y cosas a¨²n peores- y que sol¨ªan hacer esta misma jugada cuando les ven¨ªa en gana, que ¨¦l lo sab¨ªa de buena tinta.
Fueron estas dos formaciones, junto a los suecos Backyard Babies, las que mejor papel hicieron en la ¨²ltima velada. Rock recio, guitarrero y con pocas concesiones a las ¨²ltimas modas, aunque lleno de la autenticidad que se les presupone a quienes comulgan de un estilo pendiente del descontento social y el afilado sonido de las guitarras el¨¦ctricas.
Por el lado nacional, destacaron Sober, que impactaron a una at¨®nita audiencia con un sonido met¨¢lico poderoso. Un importante futuro se abre ante este grupo, que ya casi est¨¢ a nivel de los de fuera en cuanto a fuerza, convicci¨®n, sonido y canciones. Tambi¨¦n tuvieron su momento de gloria Los Enemigos, quienes, mientras tocaban, vieron caer ante ellos un tremendo aguacero que empap¨® recinto y espectadores. Sin embargo, estos ¨²ltimos no se movieron del sitio para seguir disfrutando los cl¨¢sicos temas de Josele, Fino, Manolo y Chema, guardianes del rock malasa?ero, madrile?o y urbano.
Tambi¨¦n la carpa de baile funcion¨® a las mil maravillas. A pesar de ser un recinto grande, estaba continuamente lleno de j¨®venes entregados a la magia de un baile hipn¨®tico. Pero es que en los alrededores de la carpa hab¨ªa casi m¨¢s gente a¨²n bailando, as¨ª como en el cami¨®n-discoteca instalado tambi¨¦n en el festival.
No hubo que rese?ar incidentes durante todo el festival y los equipos m¨¦dicos atendieron pocas urgencias y, como siempre, debidas a accidentes no muy importantes y las normales intoxicaciones et¨ªlicas o de otra ¨ªndole. Este Festimad 2001 se ha cerrado con visos de continuidad y de encontrar su definitiva filosof¨ªa: no hay que crecer como los dinosaurios, sino dar lo que el momento musical y social posibilita, sin perder de vista la idiosincrasia de Madrid y su comunidad. ?Ah! Y las divas a la ¨®pera.
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