El Juli: 'Estuve tan entregado como siempre, pero m¨¢s suelto'
Sin novedad en los term¨®metros. El calor derrite hasta los abanicos. Sol, moscas y mucha gente. Hasta la bandera y m¨¢s all¨¢. Tarde de toros. En barrera, el Rey, El Cordob¨¦s (Manuel Ben¨ªtez) y un se?or de Murcia. No se pas¨® lista, pero no falt¨® nadie. Por estar, hasta Antonia Dell'Atte, que no es de Murcia. Toreaba El Juli y se quer¨ªa que el d¨ªa fuera suyo. ?l tambi¨¦n. Coincidencia de objetivos, pues.
'He estado igual de entregado que siempre, pero hoy [por ayer] m¨¢s suelto'. Palabra de Juli¨¢n L¨®pez Escobar. En la habitaci¨®n del hotel Victoria en la que se acaba de ba?ar, bullicio, jarana y mucho calor de abrazo sincero. El Juli ha toreado en Madrid y ha cortado su segunda oreja como matador. 'Lo ha hecho todo bien', toma la palabra el otro Juli¨¢n, el padre. 'Muy puro', contin¨²a, 'muy de verdad. Con las banderillas, con el capote, con la muleta... muy como es ¨¦l'. Porque la lidia regular no tiene m¨¢s tercios, sino tambi¨¦n hubiera estado bien. 'Ha estado enorme en los brindis', apunta un espont¨¢neo. El entusiasmo es as¨ª, generoso en adjetivos y corto en mesura. Si no, no ser¨ªa entusiasmo.
El cari?o del p¨²blico
El Juli no se ruboriza ante tanto piropo, porque a¨²n est¨¢ en el ba?o. Sale y, 'como es ¨¦l', que dir¨ªa su padre; es decir, cercano, cari?oso y sin protocolos, se arranca: 'Lo m¨¢s importante era ganarme el cari?o del p¨²blico. Y as¨ª ha sido. La gente ha reconocido mi esfuerzo, que ha sido de verdad, y eso es lo m¨¢s importante de esta tarde'.
?Y la oreja? 'Tambi¨¦n'. ?Tambi¨¦n, qu¨¦? 'Que tambi¨¦n es importante, hombre'. Enterado. Como cuando se despidi¨® de novillero en Las Ventas, los trofeos se los ha vuelto a proporcionar un toro de Alcurruc¨¦n. Entonces,cuando a¨²n no era matador, fueron dos las orejas y, de paso, la puerta grande. Ayer no pudo ser.
'S¨ª, me falta eso. Me falta la puerta grande. Mira que iba a por todas. Pero, precisamente el toro que m¨¢s garant¨ªas daba de entrada, el de Victorino, ha sido el que no ha dejado opci¨®n', dice el matador. Su primer toro fue el de la oreja y su segundo, el de la decepci¨®n. El padre apostilla: 'Si sale un victorino complicado, seguro que hace algo. La gente habr¨ªa sabido valorar el arrojo con el que lo hubiera toreado. Pero no ha sido ni f¨¢cil ni dif¨ªcil, ha sido malo: manso, sin fuerza...'. '?Qui¨¦n lo hubiera imaginado de un victorino?', pregunta El Juli. Nadie alrededor responde. Conclusi¨®n: nadie lo imagin¨® siquiera.
?Y con qu¨¦ se queda El Juli de una tarde as¨ª? El padre con todo,est¨¢ claro. Pero, ?y el torero? 'Con los naturales a mi primer toro y quiz¨¢ con el galleo al segundo. Era muy complicado hacerlo. Se revolv¨ªa'. Piensa un segundo y a?ade: 'Y la estocada'.
'?Qu¨¦ estocad¨®n!', exclam¨® un se?or del p¨²blico a voz en grito. Hac¨ªa calor, toreaba El Juli y... Viva la hip¨¦rbole. Tarde de calor, j¨²bilo y toros.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.