El Consell mantiene en el nivel administrativo m¨¢s alto a 125 funcionarios colocados 'a dedo'

Un decreto del Consell de marzo de 1999 que regulaba el reglamento de selecci¨®n y provisi¨®n de puestos en la carrera administrativa establec¨ªa que las comisiones de servicio tendr¨ªan una duraci¨®n m¨¢xima de un a?o prorrogable por un a?o m¨¢s. Y exig¨ªa la convocatoria de concursos en ese plazo para dotar esas plazas.

M¨¢s de 300 empleados p¨²blicos nombrados en virtud de ese decreto deber¨ªan someterse ahora a concurso para conservar el puesto, entre ello 125 adscritos al m¨¢s alto nivel administrativo. Pero los concursos previstos para dotar esas plazas de forma definitiva brillan por su ausencia.

El n¨²mero de empleados interinos que ocupan puestos de m¨¢xima responsabilidad en la Consejer¨ªa de Econom¨ªa, Hacienda y Empleo en virtud del decreto en cuesti¨®n resulta muy llamativo. La custodia del erario p¨²blico es una de las tareas m¨¢s sensibles y la transparencia y profesionalidad deber¨ªan estar a la base de la gesti¨®n de la arcas de la Generalitat. Por eso sorprende que 38 empleados de la Consejer¨ªa de Econom¨ªa, Hacienda y Empleo catalogados en el grupo A con nivel 22 o 24 hayan accedido a sus puestos en comisi¨®n de servicios por designaci¨®n directa.

Entre los cargos de confianza al servicio de Vicente Rambla destacan el jefe de secci¨®n de caja y tesorer¨ªa, un cargo t¨¦cnico por excelencia; el jefe de secci¨®n de la comisi¨®n t¨¦cnica del juego, un cargo sometido a todo tipo de presiones de parte de un poderoso sector; o el t¨¦cnico de gesti¨®n y control de las ayudas p¨²blicas, un puesto en el que no deber¨ªa caber el nepotismo bajo ning¨²n concepto.

Los jefes de secci¨®n de inspecci¨®n tributaria, de elaboraci¨®n de los presupuestos, de las oficinas liquidadoras o de la unidad de valoraci¨®n son otras tantas jefaturas ocupadas de forma interina por personal en comisi¨®n de servicios cuando la naturaleza de los puestos que desempe?an requiere una alta especializaci¨®n y una evidente solvencia profesional mucho antes que el favor de los superiores.

La n¨®mina de interinos de lujo se extiende a todas las consejer¨ªas con mayor o menor incidencia. Hacienda se dispara, pero tambi¨¦n son numerosos los interinos del grupo A en el ¨¢rea de Presidencia (18), Sanidad (14) y Obras P¨²blicas (13). Los interinos de lujo no llegan a la decena en el resto de consejer¨ªas, pero algunos resultan muy llamativos.

Sanidad, por ejemplo, mantiene a siete inspectores de los servicios sanitarios con car¨¢cter interino adscritos al grupo A con salarios del nivel 24. La inspecci¨®n es una tarea en la que tampoco deber¨ªa caber la confianza con los superiores. Aunque las recientes oposiciones para dotar 55 plazas de inspectores de Educaci¨®n en las que 46 han reca¨ªdo sobre empleados que ocupaban sus cargos de forma interina por designaci¨®n directa pone de manifiesto una sospechosa vinculaci¨®n del poder pol¨ªtico con los profesionales al servicio de la Administraci¨®n auton¨®mica.

El proceder del Consell que preside Eduardo Zaplana en materia de funci¨®n p¨²blica desde julio de 1995 parece encaminado en una misma direcci¨®n, el sacrificio de los profesionales de carrera en beneficio de la promoci¨®n de los funcionarios afines, seg¨²n se desprende de las modificaciones introducidas en las sucesivas leyes de acompa?amiento de los presupuestos de la Generalitat aprobadas desde entonces.

La regulaci¨®n de la comisi¨®n de servicios como forma de dotar puestos de trabajo en la Administraci¨®n auton¨®mica para puestos vacantes y con car¨¢cter forzoso por necesidades de servicio se introdujo en diciembre de 1996.

En diciembre de 1997, un ligero retoque permiti¨® elevar a ciertos interinos a puestos de m¨¢xima retribuci¨®n al clasificar a ciertos interventores y al gabinete jur¨ªdico de la Presidencia de la Generalitat como un sector adscrito a la Administraci¨®n especial. Una alteraci¨®n que el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana anul¨® posteriormente en una sentencia que invoca principios como la publicidad, m¨¦rito, capacidad y libre concurrencia que est¨¢n a la base del acceso a puestos de trabajo en cualquier adminsitraci¨®n.

Un a?o despu¨¦s, la novedad consisti¨® en la introducci¨®n del mecanismo de adscripci¨®n de personal mediante el nombramiento provisional por mejora de empleo, un procedimiento de urgencia que deb¨ªa ser regulado para garantizar los principios de igualdad, m¨¦rito, capacidad y publicidad. Tal regulaci¨®n todav¨ªa est¨¢ pendiente.

Los cambios legales introducidos por el Consell y la ausencia de convocatorias de empleo p¨²blico durante los ¨²ltimos a?os han provocado el malestar entre muchos funcionarios de carrera, que temen que las iniciativas para paliar la precariedad laboral en la Administraci¨®n auton¨®mica vayan encaminadas, en parte, a consolidar en sus puestos definitivamente a buen n¨²mero de empleados nombrados a dedo durante los ¨²ltimos a?os.

Muchos empleados p¨²blicos sienten que el Consell ha sembrado durante a?os un problema para intentar recoger ahora por v¨ªa de urgencia una cosecha interesada.