El tribunal que juzga por torturas a 10 guardias rechaza la prescripci¨®n

El tribunal de la Audiencia de Vizcaya que juzga desde ayer a diez guardias civiles, procesados por supuestas torturas a siete personas detenidas entre los meses de noviembre y diciembre de 1980 en una operaci¨®n contra la organizaci¨®n terrorista ETA, desestim¨® la prescripci¨®n de los delitos que hab¨ªan solicitado las defensas. El juicio, que comenz¨® ayer con la declaraci¨®n de los diez acusados, es el pen¨²ltimo escal¨®n en la instrucci¨®n de un caso por supuestos malos tratos que se remonta a hace 21 a?os, cuando agentes de la Guardia Civil detuvieron en Zornotza (Vizcaya) a siete personas y desarticularon el comando Kioto de ETA.

Tras desestimarse la prescripci¨®n de los hechos, los acusados se acercaron al micr¨®fono de la sala para contestar a las preguntas de la fiscal¨ªa y de las defensas. Ninguno contest¨® a las cuestiones formuladas por parte de las acusaciones.

Casi 21 a?os despu¨¦s de los interrogatorios en la Comandancia de la Guardia Civil de La Salve, los acusados aseguraron ante el tribunal 'no recordar nada de nada' de lo ocurrido. Dos de ellos, Antonio Bailo Roche y Juli¨¢n Gonz¨¢lez Palomares, dijeron que nunca hab¨ªan pisado Bilbao y precisaron que en las fechas en las que se efectuaron los arrestos estaban destinados en Madrid y Valencia, respectivamente.

Ninguno activ¨® la memoria para recordar lo acontecido. Y, de esta forma, a preguntas de la fiscal todos, ellos admitieron en numerosas ocasiones no recordar 'nada'. Algunos de los que participaron como secretario o instructor en los interrogatorios no acertaron siquiera a explicar en qu¨¦ consist¨ªa el trabajo de secretario o instructor.

'Jam¨¢s' torturaron

Un poco m¨¢s precisos, a preguntas de las defensas, negaron haber torturado 'jam¨¢s' a los siete detenidos, o que otros les hubieran infligido malos tratos en su presencia o que sus jefes les hubieran ordenado torturarles para tratar de obtener informaci¨®n sobre las actividades de la organizaci¨®n terrorista.

Los dos ¨²nicos guardias que recordaron alg¨²n incidente en el cuartel de La Salve fueron Lucio de Sosa Robledo -condenado en dos ocasiones por torturas: en los casos Linaza y Torre Altonaga- y su compa?ero Jos¨¦ V¨¢zquez Dom¨ªnguez -condenado tambi¨¦n en el caso Torre Altonaga-. Ambos aseguran que a uno de los detenidos, Fernando Urakilis, hubo que 'reducirlo violentamente' porque hab¨ªa comenzado a pegarle a De Sosa al quedarse ¨¦ste ¨²ltimo solo en la sala en la que se estaban realizando los interrogatorios.