'Inc¨®modo'

En el suplemento Domingo de EL PA?S del 3 de junio, en el fragmento que se publica del libro El trigo de la guerra, de Mira Milosevich, se me atribuye una posici¨®n que no es m¨ªa. La autora afirma que yo la prejuzgu¨¦ en el curso de una conversaci¨®n diciendo que, si le mencionaba los cr¨ªmenes serbios en Kosovo, ella iba a sentirse 'inc¨®moda' por el hecho de ser serbia. Y subraya que, desde el momento en que ella se ha pronunciado contra tal pol¨ªtica, mi suposici¨®n est¨¢ completamente fuera de lugar. Me sorprende la tranquilidad de conciencia de la autora. Por lo que a m¨ª se refiere, dir¨ªa que el hecho de que me haya pronunciado contra el revanchismo alban¨¦s cometido en nombre de la naci¨®n albanesa -por tanto, tambi¨¦n en el m¨ªo- contra los serbios de Kosovo me resulta insuficiente para no sentirme 'inc¨®modo'. Adem¨¢s, esta ¨²ltima palabra es un eufemismo. Brecht calificaba a Alemania de 'mi verg¨¹enza', al igual que Thomas Mann y Karl Jaspers, as¨ª como (para volver a la actualidad) hace el alban¨¦s Veton Surroj en su art¨ªculo El fascismo alban¨¦s: verg¨¹enza de Kosovo. Semejante es la actitud de los intelectuales serbios que han condenado sin peros los cr¨ªmenes cometidos en nombre de su propia naci¨®n. En cuanto al libro en general (con una combinaci¨®n de hechos y de seudohechos de alg¨²n modo digeribles para el p¨²blico local), importa poner de relieve que una simetr¨ªa entre el nacionalismo serbio y el alban¨¦s no ayuda a comprender la realidad de Kosovo -ni de ninguna otra de las naciones de la ex Yugoslavia que han rechazado vivir en un Estado con hegemon¨ªa serbia-, sino que sirve ¨²nicamente para minimizar la responsabilidad serbia mediante eso que Peter Gay ha denominado 'trivializaci¨®n comparativa'.