Chechenia, ni un d¨ªa sin guerra
Dos a?os despu¨¦s del conflicto, Rusia cuenta ya m¨¢s de 3.000 muertos y no logra controlar la situaci¨®n
El triunfalismo ruso por la muerte en combate del jefe guerrillero Arb¨ª Bar¨¢yev no oculta que, casi dos a?os despu¨¦s de su comienzo, la segunda guerra de Chechenia es un avispero sin salida. Ayer, los portavoces rusos afirmaban haber causado al enemigo m¨¢s de treinta muertos y reconoc¨ªan algunas bajas propias. Desde el comienzo del actual conflicto, pasan de 3.000 las vidas rusas sacrificadas, seg¨²n fuentes oficiales, y hasta de 9.000 seg¨²n los comit¨¦s de madres de soldados.
Los enfrentamientos m¨¢s encarnizados se localizan estos d¨ªas en la garganta de Sharo-Arg¨²n (cerca de la frontera con Georgia), donde los federales cercan a un grupo de 50 rebeldes, y en las proximidades de la base de Jankal¨¢, en las afueras de Grozni, que escapa del precario control militar apenas cae la noche.
El fiscal general ruso, Vlad¨ªmir Ustinov, asegur¨® ayer que 'otros jefes terroristas' correr¨¢n la misma suerte que Arb¨ª Bar¨¢yev, muerto el jueves y considerado uno de los jefes de la 'industria del secuestro' y responsable de la decapitaci¨®n de cuatro occidentales en 1998. Ya se le hab¨ªa dado por muerto dos veces, pero en esta ocasi¨®n no hay duda: el cad¨¢ver fue identificado por su madre y una t¨ªa. Es la m¨¢s destacada pieza de caza mayor que se han cobrado las fuerzas rusas, incapaces de capturar o matar a los jefes guerrilleros Shamil Bas¨¢yev y Jatab, y al presidente Asl¨¢n Masj¨¢dov.
El di¨¢logo con Masj¨¢dov sigue siendo para diversos pol¨ªticos y analistas la ¨²nica posibilidad real de acabar con el conflicto. Rusl¨¢n Aushev, presidente de Ingushetia, fronteriza con Chechenia, es ferviente partidario de esta f¨®rmula. Para ¨¦l, no es posible la soluci¨®n militar, y Masj¨¢dov es el presidente leg¨ªtimo y el ¨²nico interlocutor posible para Rusia.
Aushev coincide en esto con las decenas de refugiados en Ingushetia, que iniciaron hace unos d¨ªas una huelga de hambre para exigir el fin de la intervenci¨®n militar rusa y la apertura de conversaciones con Masj¨¢dov. Al menos cinco de ellos han sido hospitalizados y su estado es grave. En esa rep¨²blica hay m¨¢s de 150.000 chechenos que han sobrevivido ya a dos terribles inviernos y que no creen que se den a¨²n las condiciones m¨ªnimas para regresar a sus hogares.
El diario Izvestia, en un art¨ªculo en primera p¨¢gina titulado Por la causa de la paz, manten¨ªa ayer que la muerte de Bar¨¢yev puede ser el principio de una serie de reveses para la guerrilla, tras los cuales 'ser¨ªan casi inevitables las conversaciones de paz'. El optimismo respecto a la marcha de la guerra no es compartido por Aushev, que asegura que la guerra 'engendra nuevos Bara?ev y Bas¨¢yev' y que no puede hablarse de normalizaci¨®n cuando pr¨¢cticamente no pase un d¨ªa sin que la guerrilla tirotee la base de Jankal¨¢, en la que hay 'todo un Ej¨¦rcito'.
Seg¨²n Ahmed Kad¨ªrov, el checheno que, con la aquiescencia rusa, preside la Administraci¨®n civil, la situaci¨®n es 'tensa y dif¨ªcil', y la empeoran las detenciones injustificadas de la poblaci¨®n local inocente y los saqueos durante las 'operaciones de limpieza'.
El portavoz presidencial ruso Sergu¨¦i Yastrzhembski rechaz¨® ayer a Masj¨¢dov como interlocutor v¨¢lido. 'S¨®lo el fiscal', declar¨®, 'puede mantener conversaciones con ¨¦l en el marco del proceso criminal en su contra'.
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