Gota a gota
La C¨¢mara de Cuentas revela importantes desequilibrios en el suministro de agua
Un metro c¨²bico de agua potable le cuesta a un malague?o, por t¨¦rmino medio, 73 pesetas, mientras que por la misma cantidad de l¨ªquido un almeriense paga m¨¢s del doble, unas 151 pesetas. Al cabo del a?o, son los onubenses los que m¨¢s dinero invierten en este elemento, alrededor de 14.500 pesetas, cuatro veces m¨¢s que el gasto medio anual de un jiennense, cifrado en 3.500 pesetas. En el consumo tambi¨¦n se aprecian notables diferencias, siendo los onubenses los que lideran este apartado (123 metros c¨²bicos / habitante / a?o) y los jiennenses, una vez m¨¢s, los que cierran la clasificaci¨®n (41 metros c¨²bicos). Ambas cifras se alejan bastante del consumo medio de un andaluz, establecido en 77 metros c¨²bicos.
?stos son algunos de los llamativos desequilibrios que se manifiestan en el suministro de agua potable en Andaluc¨ªa, cuesti¨®n que ha sido analizada por la C¨¢mara de Cuentas en un concienzudo informe de fiscalizaci¨®n. El objetivo final de este trabajo, como se indica en el documento de s¨ªntesis, es 'aportar datos y formular algunas sugerencias que aviven una reflexi¨®n sobre la gesti¨®n y el uso del agua en Andaluc¨ªa', consider¨¢ndolo como un elemento 'escaso, limitado y f¨¢cilmente deteriorable'.
Siendo un recurso vital, inquieta, sobre todo, el despilfarro registrado tanto en los consumos urbanos como en los agr¨ªcolas, sin que los periodos de intensa sequ¨ªa hayan servido para modificar esta situaci¨®n. As¨ª, y durante 1999, las p¨¦rdidas de agua potable, o vol¨²menes no facturados, en redes de distribuci¨®n urbana supusieron, como valor medio en Andaluc¨ªa, el 29%. Ja¨¦n es la provincia que mayor volumen de agua deja sin facturar, alcanzando el 40% sobre el total de l¨ªquido que entra en los dep¨®sitos municipales. Sevilla, por el contrario, es la provincia que menos p¨¦rdidas registra, con un 19%.
Lo elevado de estos porcentajes se debe, en parte, a que los consumos p¨²blicos de agua, destinados, por ejemplo, a riego de jardines, dotaci¨®n de fuentes o baldeo de calles, no se miden por contador ni est¨¢n aforados, por lo que carecen de contrato de suministro, a pesar de que existe una exigencia normativa en este sentido. A juicio de la C¨¢mara de Cuentas, esta irregularidad ocasiona, por un lado, 'un escaso control de los usos p¨²blicos y, en numerosas ocasiones, consumos excesivos y, por otro, que estos consumos se contabilicen como fugas o p¨¦rdidas, repercutiendo sus costes en todos los ciudadanos'.
Los sistemas de control y cobro arrastran deficiencias que tambi¨¦n causan perjuicios a los usuarios. El buen funcionamiento de contadores y aparatos de medida raramente se comprueba, ni siquiera, como exige la ley, cuando hay un cambio en la titularidad del suministro.
En lo que se refiere al consumo agr¨ªcola, la C¨¢mara de Cuentas insiste en un dato ya conocido: el 80% de la demanda total de recursos h¨ªdricos en Andaluc¨ªa est¨¢ orientada a este sector. En contraste con los precios que se pagan en el suministro urbano, un agricultor apenas abona, como media, 6,4 pesetas por cada metro c¨²bico consumido, lo que supone unos gastos que rondan las 30.000 pesetas por hect¨¢rea regada.
'Una pol¨ªtica hidr¨¢ulica que oferte nuevos recursos h¨ªdricos a bajo coste econ¨®mico', precisa el documento, 'genera una mayor demanda de agua para riego, por lo que ser¨ªa necesario modificar el modelo tarifario, haciendo que la facturaci¨®n se realice por volumen, por tramos de consumo, y su cuant¨ªa est¨¦ en funci¨®n directa de la garant¨ªa de suministro'. En definitiva, la C¨¢mara de Cuentas, al igual que otros organismos, se inclina por valorar econ¨®micamente el agua destinada a la agricultura, de manera que, paulatinamente, se traslade su coste real a los regantes, o bien se establezca un precio que fomente la gesti¨®n eficiente de este recurso en el sector primario.
En Andaluc¨ªa s¨®lo el 53% de las redes de distribuci¨®n de agua para fines agr¨ªcolas se encuentra en buen estado. En la provincia de Granada, por ejemplo, el 50% de este tipo de canalizaciones presenta importantes deficiencias, lo que ocasiona la p¨¦rdida de grandes cantidades de agua. Por el contrario, las provincias de Ja¨¦n y Huelva son las m¨¢s eficientes en este apartado, ya que el 70% de sus redes de distribuci¨®n obtiene buenas calificaciones.
Comentarios y sugerencias a prop¨®sito de Cr¨®nica en verde pueden remitirse al e-mail: sandoval@arrakis.es
Auditor¨ªas de agua
La C¨¢mara de Cuentas propone establecer auditor¨ªas de agua, cuyo objetivo ser¨ªa evaluar el uso de este recurso en un periodo de tiempo determinado y para una finalidad concreta, estimando potenciales medidas de ahorro y dise?ando, a partir de la informaci¨®n recopilada, planes de uso eficiente. Esta f¨®rmula deber¨ªan adoptarla, en primer lugar, los ayuntamientos y la administraci¨®n de la Junta, de manera que pudieran establecerse f¨®rmulas para racionalizar el consumo en los usos p¨²blicos, como riego de jardines, baldeos, suministro a instalaciones deportivas o dotaci¨®n en los propios inmuebles donde se desarrolla la actividad de estos organismos. Respecto al uso urbano, tambi¨¦n se sugiere un nuevo modelo de gesti¨®n, en el que podr¨ªa diferenciarse entre agua potable, destinada al consumo humano, y aguas no potables, orientadas a otras finalidades como el aprovechamiento industrial o la conservaci¨®n y limpieza de las ciudades. As¨ª, detalla el informe, 'la distribuci¨®n podr¨ªa realizarse a trav¨¦s de redes distintas, facilitando el reparto de agua para usos diferentes y, en consecuencia, con calidades y precios distintos'. La eliminaci¨®n de los contadores colectivos en comunidades de propietarios, sustituy¨¦ndolos por sistemas de control individuales, tambi¨¦n servir¨ªa para fomentar el ahorro. En algunos casos, podr¨ªan estudiarse f¨®rmulas que permitieran agotar todos los usos posibles de agua antes de proceder a su vertido, haciendo posible, por ejemplo, que el l¨ªquido empleado en duchas y lavabos pudiera reconducirse hacia los inodoros. En lo que se refiere a los regad¨ªos agr¨ªcolas es imprescindible acometer su modernizaci¨®n, ya que los sistemas m¨¢s antiguos, que funcionan por gravedad, pueden llegar a demandar dotaciones brutas que superan en un 40% las necesidades reales de los cultivos. Las p¨¦rdidas en las redes m¨¢s modernas se reducen a menos de un 10 %.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.