La entrega de dos generales a La Haya rompe la coalici¨®n que gobierna Croacia
La crisis abierta por los acusados de cr¨ªmenes de guerra puede obligar a un adelanto electoral
'La no cooperaci¨®n con el TPIY representa una pol¨ªtica de aislamiento y de enemistad hacia Europa, una vuelta hacia el abismo balc¨¢nico, del que Serbia est¨¢ logrando salir con pasos decisivos', agreg¨® el primer ministro al t¨¦rmino de una tormentosa reuni¨®n de su Gabinete, que se prolong¨® durante casi ocho horas y provoc¨® la dimisi¨®n de cuatro miembros del Ejecutivo. El precio del anuncio de la entrega a La Haya ha sido una grave crisis pol¨ªtica entre los partidos de la coalici¨®n gobernante y de la oposici¨®n, que podr¨ªa acabar con el Gobierno del socialdem¨®crata Ivica Racan, que el 3 de enero de 2000 derrot¨® al partido nacionalista del fallecido presidente Franjo Tudjman.
Los socialdem¨®cratas fueron abandonados por los social-liberales de Drazen Budisa, quienes votaron en contra de la extradici¨®n de dos generales del Ej¨¦rcito croata, cuyos nombres no han sido revelados oficialmente. No obstante, seg¨²n todos los indicios, los generales son Ante Gotovina, retirado hace un a?o por el presidente croata, Stjepan Mesic, tras haber criticado la cooperaci¨®n de Croacia con el TPIY, y Rahim Ademi, perteneciente a la etnia albanesa y todav¨ªa activo. Gotovina ser¨ªa responsable, entre otros cargos, de la ejecuci¨®n de centenares de civiles serbios en 1995.
La guerra de la Krajina
Ademi responder¨ªa por cr¨ªmenes de guerra cometidos en 1993 en uno de los intentos de recuperar los territorios ocupados por los serbios en la Krajina desde 1991. Gotovina, el m¨¢s carism¨¢tico y respetado de los generales croatas, fue visto el jueves en un restaurante c¨¦ntrico en Zagreb, distendido y sonriente. 'Si soy culpable, lo es tambi¨¦n toda Croacia por haberse defendido de la agresi¨®n serbia', dijo entonces.
El l¨ªder social-liberal Budisa impuso a su partido una postura muy similar a la adoptada por los diputados de la nacionalista Uni¨®n Democr¨¢tica Croata, fundada por Tudjman. Considera inaceptable el hecho de que las acusaciones realizadas por el TPIY 'cuestionan la validez de las operaciones militares' con las que Croacia recuper¨®, entre mayo y agosto de 1995, los territorios ocupados por los serbios que se sublevaron cuatro a?os antes con el apoyo del Ej¨¦rcito Federal Yugoslavo.
En dichas acusaciones, seg¨²n fuentes social-liberales, est¨¢ escrito que el objetivo de las operaciones militares fue expulsar a 150.000 ciudadanos croatas pertenecientes a la comunidad serbia. En otras palabras, las autoridades croatas ser¨ªan indirectamente acusadas de haber llevado a cabo una pol¨ªtica de limpieza ¨¦tnica en su propio territorio.
Al informar a la prensa del resultado de la votaci¨®n de su Gabinete, el primer ministro Racan no ocult¨® su abierto temor a que la derecha y los excombatientes, como han amenazado, bloqueen los pasos de frontera y las carreteras en plena temporada tur¨ªstica, cuyo ¨¦xito es necesario para que Croacia comience a salir de la profunda crisis econ¨®mica que sufre.
Adem¨¢s, Racan mostr¨® su preocupaci¨®n por la posibilidad de la ca¨ªda de su Gobierno, la convocatoria de elecciones parlamentarias anticipadas y la vuelta al poder de los nacionalistas. Tras reconocer la gravedad de la situaci¨®n, Racan dijo que pedir¨¢ al Parlamento 'lo m¨¢s pronto posible' un voto de confianza. Los social-liberales de Budisa podr¨ªan votar en su contra, lo que acabar¨ªa con el Gobierno. El presidente del Parlamento, Zlatko Tomcic, respondi¨® ayer que la votaci¨®n podr¨ªa ser organizada en torno al 15 de julio.
La extradici¨®n de los generales tambi¨¦n fue respaldada por el presidente Mesic, quien, en un comunicado de prensa, manifest¨® ayer que la declaraci¨®n del estado de emergencia era inaceptable. 'S¨®lo la identificaci¨®n de los responsables de cr¨ªmenes de guerra nos permitir¨¢ evitar el s¨ªndrome de la culpa colectiva y liberarnos de quienes se han ensangrentado sus manos', enfatiz¨® Mesic.
El arzobispo de Zagreb y presidente de la Conferencia Episcopal Croata, Josip Bozanic, pidi¨® ayer que 'los que gobiernan y encauzan los acontecimientos no den motivos a reacciones de sentimientos incontrolados que pueden da?ar el bien com¨²n, la paz y la seguridad'. Bozanic reconoci¨® que las diferencias y divisiones en la sociedad croata crecen y expres¨® que es necesario abrirse al futuro.
?ste podr¨ªa ser un diagn¨®stico de la sociedad croata, dividida desde la II Guerra Mundial entre aquellos que consideran patri¨®tica la pol¨ªtica fascista, racista y de colaboracionismo con los nazis de Ante Pavelic (l¨ªder del Estado independiente de Croacia, que desencaden¨® un genocidio contra serbios y jud¨ªos) y aquellos que quieren dejar atr¨¢s ese pasado ultranacionalista.
Los croatas que se oponen a la extradici¨®n de los generales acusados por La Haya, a menudo portan s¨ªmbolos del sangriento movimiento ustasha de Pavelic, y en sus protestas repiten lo mismo que se ha escuchado en Belgrado con motivo de la extradici¨®n de Milosevic. Parad¨®jicamente, enfrentados en sus nacionalismos, ambos bandos se han aliado en su desprecio por la justicia internacional. Y no escuchan ni quieren entender ni cuando la fiscal Carla del Ponte asegura que el Tribunal de la ONU no intenta 'criminalizar la liberaci¨®n de los territorios ocupados', sino establecer la responsabilidad individual de altos jefes militares.
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