Del rigor de Bill Wyman o Noa a la desinhibici¨®n tropical de Cacha¨ªto

- El patio m¨¢s musical. 'Ojal¨¢ todos los cuarteles se conviertan en auditorios', dijo Ismael Serrano el d¨ªa del arranque del Jazztel Music-Veranos de la Villa 2001. De momento, hasta que su deseo se cumpla, el patio del cuartel del Conde Duque, donde se celebra el festival hasta finales de julio, se ha convertido en el m¨¢s musical de Madrid. Acompa?ado de The Rhythm Kings, el antiguo bajista de los Rolling Stones Bill Wyman es su estrella principal esta semana. Con un car¨¢cter tranquilo que contrastaba con los otros miembros de la legendaria banda, Wyman eligi¨® hace tiempo dedicarse a recrear a los grandes del blues, el soul, el jazz y el rhythm and blues. Acaba de editar Double Bill, el cuarto disco que publica con The Rhythm Kings, una banda, fundada junto a su amigo Terry Taylor, de echarse a temblar: en sus filas militan Georgie Fame, Gary Brooker o Albert Lee, personajes acostumbrados a tratar de t¨² a t¨² a tipos como Van Morrison, Eric Clapton, Barry White o B. B. King.

La israel¨ª Noa concilia sus ascendencias jud¨ªa y yemen¨ª con su educaci¨®n neoyorquina. Dotada de una dulce voz y de talento para las percusiones, Noa es una militante de la b¨²squeda de la paz entre jud¨ªos y palestinos, como hace ver en algunos pasajes de Blue touches blue, su ¨²ltimo disco, sobre el que basar¨¢ su concierto de hoy en el Conde Duque. Ah¨ª sonar¨¢n tambi¨¦n las canciones de Vonda Shepard, reactivadas otra vez gracias a la reposici¨®n de la serie televisiva Ally McBeal, que ilustra con sus actuaciones.

Pero seguramente ser¨¢ la de Cacha¨ªto L¨®pez la actuaci¨®n que m¨¢s haga mover a los que acudan al patio del cuartel. Su familia es parte de la historia de la m¨²sica cubana: es sobrino del gran Cachao e hijo de Orestes L¨®pez. Aunque empez¨® tocando el viol¨ªn, Cacha¨ªto se pas¨® al contrabajo por imperativo de los genes. Hace jazz latino con enjundia y sabor, de profunda musicalidad, pero ameno y divertido.

- Brasil... y Argentina. Fernanda Abreu, a la que en un alarde de originalidad han bautizado como la Madonna tropical, presenta su reciente disco, Entidade urbana, donde se muestra audaz combinando los ritmos de su Brasil natal con los de los ordenadores y secuenciadores. Una experimentaci¨®n muy adecuada con el esp¨ªritu del Global 2001, el festival que intenta conciliar los ritmos ¨¦tnicos con los digitales.

Andrea Marquee, tambi¨¦n brasile?a, anda ese mismo camino, pero al rev¨¦s. Si la Abreu hace m¨²sica electr¨®nica apoyada en la brasile?a, Marquee hace m¨²sica brasile?a con apoyo de electr¨®nica. En ella se entiende mejor la samba y la bossa, aunque suene muy contempor¨¢nea.

Sin embargo, el tercer brasile?o de la semana, Giani Mendes, parece casi m¨¢s espa?ol. Alumno de Manolo Sanl¨²car, se ha atrevido a pasar a rumba flamenca el famoso Coraz¨®n part¨ªo de Alejandro Sanz.

Rafael Amor teje sus canciones con la impronta madrile?a y su pasado argentino, folclor que recrea el d¨²o formado por Manuel ?lvarez y Sebasti¨¢n Mart¨ªn. Pero es el tango lo que muestra la grandeza musical de Argentina. Esta semana lo recrean a modo instrumental el Ensamble Nuevo Tango y, cantado con chispa y humor, Mirian Penela.

- Que no falte el rock. Liderado por el vocalista de Faith No More, Mike Patton, Fant?mas sirve la dosis necesaria de rock fuerte, aunque se atreva con las melod¨ªas de Henry Mancini. Los suecos Kevlar y los catalanes Stand Still y Nunnery Fuzz Machine concelebran una noche punki, mientras que Red House, M-Clan o ?aco Go?i y Los Bluescavidas a¨²nan rock y blues y sonidos setenteros.

El Sr. Antipirina toca por un Lavapi¨¦s mestizo, mientras que Nauta y su banda, Rev¨®lver y El Efecto Mariposa apuestan por la melod¨ªa y la letra.

- Harper y otros. El hip-hop en espa?ol de Disky Wick y The Goup y las diabluras en los plat¨®s de los pinchadiscos Paul Jackson e Ismael Rivas o Roberto Rodr¨ªguez ponen la m¨²sica del futuro, al tiempo que F¨¦lix Alcolea rinde un homenaje a la copla y Pedro Iturralde sigue mostrando lo mejor del jazz patrio. La m¨²sica cl¨¢sica se renueva con los conciertos programados por el Instituto de la Juventud, que ponen fin al encuentro Injuve 2001 para nuevos creadores e int¨¦rpretes.

Pero es la de Ben Harper una de las actuaciones m¨¢s esperadas. El californiano esgrime canciones monumentales con una gran carga emocional. Exquisitas y tranquilas a simple vista, pero llenas de fuerza y energ¨ªa. Burn to shine es su ¨²ltimo disco de estudio, aunque ahora anda presentando por el mundo Life from Paris, un disco en directo grabado hace pocos meses con lo mejor de su repertorio.