La trastienda de un 'megafichaje'

La telepat¨ªa entre Jorge Valdano y Florentino P¨¦rez comenz¨® a cocinar en el imaginario madridista el fichaje de Zidane a finales de 2000. El director general deportivo del Madrid so?aba con una estrella acorde con su buen paladar futbol¨ªstico. El presidente, por su parte, deslizaba la posibilidad de echar las redes sobre un crack mundial como objetivo estrat¨¦gico de la instituci¨®n, sobre todo de cara al centenario de la entidad. El punto de encuentro fue sencillo: Zidane, ese era el nombre que mejor encajaba en los deseos de ambos.

Dicho y hecho. Los primeros movimientos comenzaron en Navidades. A los dirigentes blancos les llegaron se?ales de humo desde Tur¨ªn. Los tambores anunciaban que Zidane quer¨ªa jugar en Madrid. Florentino P¨¦rez y Valdano indagaron. Se convencieron de que as¨ª era y el pasado mes de mayo, no antes, decidieron disparar la operaci¨®n. Para entonces, Zizou ya hab¨ªa madurado a¨²n m¨¢s su idea: dejar el Juventus y, preferentemente, jugar en el Bernab¨¦u. Visto lo visto, el Madrid abri¨® las primeras v¨ªas de negociaci¨®n y comprob¨® la complejidad de la misma. En principio, el Juventus se mostr¨® completamente herm¨¦tico; sobre todo, tras difundirse en los medios que el Madrid flirteaba con su estrella. La situaci¨®n lleg¨® a tal punto que los blancos se encontraron con una situaci¨®n inmanejable.

Justo unos d¨ªas antes de acabar la Liga espa?ola, el Madrid pis¨® el acelerador. Florentino P¨¦rez y Jorge Valdano se reunieron en Lyon (Francia) con Zidane y su representante, Alain Migliaccio. Para entonces, el franc¨¦s ya hab¨ªa planteado personal y tajantemente al propietario del Juventus, el todopoderoso Giovanni Agnelli, presidente de la Fiat, su decisi¨®n de irse. En aquella cita de Lyon, los madridistas entregaron a Migliaccio dos folios con una serie de razones por las que el jugador deb¨ªa estampar su firma en La Castellana: el poder¨ªo del Madrid, la calidad de sus jugadores, el glamour de un f¨²tbol espa?ol m¨¢s sutil que el italiano, el programa del centenario... Valdano y el presidente sugirieron jocosamente al representante de Zidane que todos los d¨ªas encontrara un hueco para leer al jugador el contenido de la carta. De regreso a Tur¨ªn, Zidane esgrimi¨® ante Agnelli motivos familiares. Ver¨®nica, su mujer, quer¨ªa salir de Italia, y su ilusi¨®n era afincarse en la tierra de sus padres, en Espa?a.

As¨ª las cosas, un tercero contribuy¨® acelerar la operaci¨®n: Rui Costa. El Madrid le pidi¨® un baile y, por primera vez, en la sede juventina sintieron un molesto cosquilleo. Si el Madrid fichaba al portugu¨¦s, la Juve se pod¨ªa quedar sin un bocado econ¨®mico extraordinario y con una estrella cabreada. Mal negocio para el equipo de la Fiat. En paralelo al mosqueo turin¨¦s, el Madrid contact¨® de nuevo con el jugador para hacerle saber que no hab¨ªa tiempo que perder, la ¨²nica oferta era para este a?o, nada de esperar a que pasara el centenario y el franc¨¦s cumpliera los 30.

El lunes 2 de julio Florentino P¨¦rez se reuni¨® en Lugano (Suiza) con directivos del Juventus. El encuentro result¨® frustrante: la Juvepidi¨® 20.000 millones de pesetas. El presidente espa?ol dio por cerrado el asunto, la cifra era disuasoria incluso con el centenario de por medio. Pero era un farol. Dos d¨ªas despu¨¦s la Juve fij¨® una asambleaen casa. El hermano de Giovanni, Umberto Agnelli (presidente honorario del Juventus), prest¨® su lujosa mansi¨®n de Lamandria, en las afueras de Tur¨ªn, para un encuentro entre Florentino P¨¦rez, Jorge Valdano, Luigi Moggi -director general del club italiano-, Roberto Bettega -director deportivo-, Antonio Giraudo -administrador general- y un abogado italiano. Umberto Agnelli no se qued¨® al c¨®nclave. Buena se?al. Sus directivos ten¨ªan instrucciones precisas. Mientras contemplaban alg¨²n Picasso y alg¨²n que otro Mir¨®, los madridistas se dieron cuenta al instante de que el traspaso estaba hecho. Y desde la noche del domingo hasta ayer tuvieron 21 horas a Zidane en Madrid. Alojado en un lujoso hotel, el franc¨¦s pas¨® de 18 de las 21 horas junto a su agente y Jorge Valdano. Dedic¨® dos horas a los m¨¦dicos, la firma y la presentaci¨®n, y otra a la comida oficial, celebrada en un restaurante de 13.000 millones de tenedores. Acudieron su fiel Migliaccio, Florentino P¨¦rez, Jorge Valdano, Fernando Fern¨¢ndez Tapias (vicepresidente), Jos¨¦ ?ngel S¨¢nchez, director general de mercadotecnia, Alfredo Di St¨¦fano (presidente honorario) y Amancio. A las 17.30, cuando el avi¨®n de Zizou rumbo a Par¨ªs tomaba altura... por fin todos hicieron la digesti¨®n a gusto.