Pasotismo de algunos conductores de la EMT

Soy un usuario del autob¨²s a diario de las l¨ªneas 19 y 22, y son de ¨¦stas de las que me quiero quejar. Hay varios motivos para quejarme de la l¨ªnea p¨²blica de transporte, pero la que hoy me trae a su peri¨®dico es la siguiente:

Resulta que desde hace tres o cuatro a?os me irrita cada vez m¨¢s el pasotismo absoluto con el que los conductores nos obligan a padecer las inclemencias temporales sin ninguna l¨¢stima.

Yo no pido que aumente el n¨²mero de autobuses, ni la calidad (tampoco vendr¨ªa mal).

Yo s¨®lo pido que eduquen en humanidad a los conductores; que, por favor, me fastidia un mont¨®n, por no emplear palabras mayores, estar cal¨¢ndome hasta los huesos a tres grados bajo cero a las siete de la ma?ana en enero, o as¨¢ndome como un pollo en julio con 40 grados cent¨ªgrados en los marcadores de la plaza de Legazpi, mientras el autobusero de turno se troncha de risa contando no s¨¦ qu¨¦ al compa?ero saliente.

?se no s¨¦ qu¨¦ dura 10 minutos.

No pido que los caballeros cumplan con sus rituales de relax, si es que su horario se lo permite, pero, por Dios, que nos dejen entrar en el autob¨²s y disfrutar del aire acondicionado o de la calefacci¨®n.

No se pueden imaginar la risa que me entra cuando veo los anuncios de 'deja el coche; utiliza el transporte p¨²blico'.

Vamos, si no fuera porque la econom¨ªa no me lo permite, iba yo a utilizar la Empresa Municipal de Transportes.

?Es tanto lo que pido?