Un l¨ªder err¨¢tico

Wahid asumi¨® la presidencia de Indonsia hace 21 meses -arrebat¨¢ndole el cargo a Megawati Sukarnoputri, cuyo partido hab¨ªa obtenido el mayor n¨²mero de votos- en medio de enormes esperanzas de que conseguir¨ªa solucionar la crisis econ¨®mica, los violentos conflictos separatistas y la corrupci¨®n extendida por ese archipi¨¦lago del sureste asi¨¢tico de 210 millones de personas. El cl¨¦rigo musulm¨¢n, casi ciego, con una visi¨®n pol¨ªtica liberal, era considerado entonces un l¨ªder conciliador, que suavizar¨ªa la tormentosa transici¨®n a la democracia tras la ca¨ªda del r¨¦gimen de Suharto. Pero Wahid demostr¨® ser err¨¢tico y antag¨®nico, y pas¨® gran parte de su mandato viajando al extranjero y peleando con antiguos aliados. La controversia sobre su liderazgo es la m¨¢s severa crisis pol¨ªtica que ha azotado Indonesia, la cuarta naci¨®n m¨¢s poblada del mundo, desde que comenz¨® una dif¨ªcil transici¨®n democr¨¢tica hace tres a?os.

Wahid se?al¨® en un discurso televisado el domingo que sus seguidores, que le consideran un hombre santo elegido por Dios para dirigir la naci¨®n, reaccionar¨ªan violentamente si fuera expulsado de su cargo, lo que despert¨® los temores de otra turbulenta transici¨®n pol¨ªtica. Vaticin¨® adem¨¢s 'un gran caos' en la naci¨®n, donde varias provincias acelerar¨ªan sus intentos de secesi¨®n. Ayer s¨®lo 500 de sus seguidores se apostaron frente al palacio presidencial para defenderle.