Nueva oleada de actos vand¨¢licos y ataques nocturnos en Euskadi
Los saboteadores proetarras han perpetrado 23 atentados desde que muri¨® Castresana
Hernani e Ir¨²n (Guip¨²zcoa), Amorebieta y Sopelana (Vizcaya), Vitoria y Pamplona sufrieron el viernes la tercera noche consecutiva de vandalismo callejero y ataques a domicilios de personas. Con estas ¨²ltimas, la m¨¢s grave de ellas el ataque a la vivienda del responsable de UGT en Hernani y afiliado socialista, Jos¨¦ P¨¦rez, son ya 23 las acciones de este tipo llevadas a cabo por saboteadores abertzales desde el mi¨¦rcoles. Los ataques empezaron un d¨ªa despu¨¦s de la muerte -al estallarle la bomba que mani-pulaba- de la presunta etarra Olaia Castresana en Torrevieja.
Una dotaci¨®n de la Ertzaintza en Amorebieta, el coche particular de un agente vasco en Vitoria, una oficina de Seguros Vitalicio y la sede de la Cadena SER en Ir¨²n, un cajero del BBVA en Sopelana y varios contenedores de basura en Pamplona fueron los objetivos. En ninguno de ellos se produjeron da?os personales.
El ataque m¨¢s grave, a la 1.40 de la madrugada, lo sufri¨® el domicilio de Jos¨¦ P¨¦rez, en el que se encontraban dos de sus hijos. El incendio ocasionado en el rellano de la escalera afect¨® a la puerta de su vivienda y a las de los otros dos vecinos del mismo piso.
P¨¦rez, liberado por su sindicato en la sede local de la UGT de Hernani, viene siendo objeto de un acoso incesante en esa localidad gobernada por EH, que ayer denunci¨® el secretario general del sindicato en Euskadi, Carlos Trevilla. ?ste calific¨® como 'muy dura' la situaci¨®n que vive P¨¦rez, as¨ª como lo reiterativo de 'la persecuci¨®n que se est¨¢ haciendo de su persona', para la cual pidi¨® respuesta ciudadana activa. El nombre de P¨¦rez ha aparecido en el centro de dianas amenazantes en su domicilio, en el front¨®n de la localidad, en cabinas de tel¨¦fonos e incluso en su veh¨ªculo, que fue calcinado en marzo.
La Ertzaintza fue el objetivo de dos ataques. En Amorebieta, ocho personas con el rostro cubierto arrojaron c¨®cteles m¨®lotov al paso de una furgoneta de la polic¨ªa vasca, sobre las 2.30 de la madrugada. Ninguno impact¨® en el veh¨ªculo sino que estallaron contra el suelo y las paredes cercanas.
Un artefacto bajo un coche
En Vitoria, a las 23.30 del viernes, un artefacto con bombonas de c¨¢mping-gas y un petardo explot¨® bajo el veh¨ªculo particular de un ertzaina. Un hombre y una mujer, acompa?ados de tres ni?as, cruzaban hacia el veh¨ªculo cuando observaron un chisporroteo, lo que les llev¨® a detenerse en mitad de la calzada. Eso les libr¨® de ser alcanzados por la explosi¨®n, que se produjo inmediatamente.
En Ir¨²n, otro artilugio estall¨® a las 3.30 ante la oficina de Seguros Vitalicio, y 10 minutos despu¨¦s un segundo afect¨® a la entrada de las instalaciones de la Cadena SER en la localidad, aunque s¨®lo da?¨® la persiana. La emisora ya fue atacada en otra ocasi¨®n y el nombre de uno de sus trabajadores apareci¨® en pasquines. El ayuntamiento de la ciudad afirm¨® que, pese a la ausencia de heridos, el da?o que el hostigamiento y la amenaza est¨¢n ocasionando a muchas personas es 'profundo y grave'.
En Pamplona, tambi¨¦n de madrugada, ardieron contenedores de basura en dos puntos del casco viejo. Poco antes de medianoche, un cajero del BBVA result¨® da?ado en Sopelana.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.