Agua

Ahora, en pleno verano, cuando el sol revienta las rocas, sin una brizna de viento y con el mar en calma, los pescadores ve¨ªan deslizarse, a ras de agua, el alma del mar. O¨ªan los suspiros largos y profundos de una sombra blanca, cubierta con sutiles velos, que habr¨¢ huido despavorida ante la feroz especulaci¨®n en las orillas, la matricida contaminaci¨®n y la depredaci¨®n salvaje de unas entra?as que engendraron, con el concurso del espumante esperma de Zeus, a la ven¨¦rea Afrodita, la diosa del amor. Aquel era el esp¨ªritu -un le¨®n, un gigante, un demonio, figuraciones populares del marino Poseid¨®n- que le transmiti¨® el gra¨¢lico c¨¢ntaro generador regalado, seg¨²n un cuento, a una viejecita -quiz¨¢s una madre tierra est¨¦ril, sin humedades- por el solar Jes¨²s, acompa?ado de Pedro, su sat¨¦lite y vicario, heredero de las potencias del marinero Neptuno, cuando ¨¦sta les calm¨® la sed con la escasa agua que pose¨ªa; ya no le faltar¨ªa nunca el vital l¨ªquido y, en efecto, al dejar, descuidada y descre¨ªda, el pitorro abierto man¨® tanta agua que inund¨® la casa, el pueblo, el valle y las tres cuartas parte de la corteza terrestre.

De una matriz vasija habr¨ªa nacido el m¨¢s extenso y poblado ¨²tero. Madre mar, fecundada por el aliento divino al comienzo del tiempo. Agua madre, esencial principio, protomateria, origen de la vida y su sost¨¦n; constante ciclo sin pausa: de la fuente al r¨ªo y al oc¨¦ano, la evaporaci¨®n y la celestial lluvia fertilizadora y, de nuevo, el m¨ªtico surtidor del Para¨ªso, que cantaba y bailaba al chorrear la eterna juventud y el m¨¢s claro conocimiento. Sin forma, expresa el inconsciente, la nada, el caos primordial. Emerger es renacer iniciado, resucitar transfigurado; sumergirse es diluirse, sepultarse, retornar al vientre materno, un rito practicado con tanta devoci¨®n cada agosto, el mes del diluvio, que recre¨® una humanidad nueva, igual que con la inmersi¨®n bautismal de bienvenida surge un hombre nuevo, despedido con un sagrado aspergiar que imita el rociar divino; nuestras vidas son r¨ªos y el vivir un fluir 'faent camins dubtosos per la mar'.