El teatro se mueve entre los vagones del metro

'Esperen un momento, que cuando pasa el tren no se oye', advierte uno de los actores a los espectadores pasadas las 18.30, durante la primera representaci¨®n. Pero el ruido no importa, porque en estas sesiones de teatro gratuito en el metro que ha organizado la Direcci¨®n de la Juventud de la Comunidad de Madrid en colaboraci¨®n con la Consejer¨ªa de Obras P¨²blicas, la idea es que la interpretaci¨®n se interaccione con el ambiente y los sonidos del suburbano.

La estaci¨®n de metro de Pr¨ªncipe P¨ªo (l¨ªneas 6 y 10) se convirti¨® ayer en un escenario teatral improvisado, con espectadores en las barandillas, en las escaleras y de pie delante del escenario, y seguir¨¢ si¨¦ndolo durante todo el d¨ªa de hoy y de ma?ana. Las tres compa?¨ªas ganadoras del Marat¨®n de Teatro Joven que la Comunidad celebr¨® en junio son las encargadas de amenizar estas tardes y noches a aquellas personas que, tambi¨¦n en agosto, utilizan el metro. Tres obras acercar¨¢n el teatro a los vagones del suburbano en tres sesiones distintas y de 50 minutos de duraci¨®n: a las 18.30 -la hora en la que, seg¨²n los organizadores, la mayor¨ªa de los espectadores son gente de paso-, a las 20.30 y a las 22.30.

'No s¨¦ lo que me voy a encontrar, es un reto; de hecho, pensaba que no vendr¨ªa nadie', dice un actor

A las 18.30 actuar¨¢ la compa?¨ªa Pos-Pos Teatro, que colabora habitualmente en el show de Paramount Comedy, con la obra Huecos, dirigida por Juli¨¢n Quintanilla y que analiza las relaciones entre el hombre y la mujer.

Es la primera vez que se lleva a cabo una iniciativa que pone en escena s¨®lo teatro, pues la ¨²nica experiencia parecida organizada por la Consejer¨ªa de Educaci¨®n fue el Metr¨®nomo, un festival de danza, teatro y m¨²sica celebrado en mayo pasado tambi¨¦n en el suburbano.

Despu¨¦s de la primera representaci¨®n llega, alrededor de las 20.30, Reflexiones de una persona aparentemente normal y otras canciones, de Jorge Segura y Alfredo Cantudo. ?sta es m¨¢s una obra de teatro puro, 'porque la anterior es m¨¢s de presentaci¨®n para captar a la gente', afirma Andr¨¦s Garc¨ªa, asesor de la Consejer¨ªa de Educaci¨®n. 'Deber¨ªa haber menos pantallas de televisi¨®n en el metro, que no se sabe para qu¨¦ sirven, y m¨¢s eventos de ¨¦stos', propon¨ªa ayer ?scar Mart¨ªn, un conserje que intenta acudir a todos los encuentros culturales gratuitos que se organizan en la capital.

La compa?¨ªa Somos la Pera representa, a las 22.30, la obra Las engendras televisivas, un espect¨¢culo dirigido por Raquel Toledo y que interpretan Isabel Pintor y Esperanza Pedre?o.

A esa hora, con una tranquilidad mayor en los pasillos del metro, los espectadores parecen trasladarse con m¨¢s facilidad a los palcos de un teatro. En efecto, est¨¢ previsto que esta sesi¨®n, que se representa de forma divertida a modo de cabaret, sea la que mayor n¨²mero de gente re¨²na.

'Aqu¨ª ahora hay gente que sabe de teatro y ha venido a ver la obra, no porque pasaban por aqu¨ª', aseguraba Juana, una jubilada que ayer acompa?¨® a los actores en las tres sesiones que se ofrecieron.

Esta iniciativa, seg¨²n sus organizadores, es una experiencia piloto en la que los actores han tenido que considerar las posibles eventualidades que pueden surgir en el metro. 'No s¨¦ con lo que me voy a encontrar, es un reto; de hecho, pensaba que no iba a venir nadie y ya hay aqu¨ª 60 personas', explicaba el actor Jorge Segura mientras arreglaba un equipo de sonido preparado para combatir el ruido de los trenes, que pasaban a escasos diez metros del escenario.

En un determinado momento, todo el p¨²blico que ayer por la tarde asist¨ªa a la obra se desplaz¨® del escenario hacia los andenes: un fortuito y peque?o incendio en uno de los vagones interes¨® mas a los espectadores. El actor, entre parodias sobre hamburgueser¨ªas, sucumbi¨® a la situaci¨®n y, alegremente, modific¨® su mon¨®logo: '?Se arregla el dichoso incendio o no? Que se nos va de aqu¨ª la clientela...', recit¨®.