Antoni Miralda convierte un gallinero en una cita art¨ªstica
S i no hay ni una sola receta. ???Tiene huevos la cosa!!!'. La frase, ya tachada, inaugura un cuaderno en cuya cubierta (amarilla) se puede leer: 'Apunte aqu¨ª sus mejores recetas de huevos (se publicar¨¢)'. La cosa, as¨ª descrita, pinta rara. Pero no lo es tanto. La libreta acompa?a una instalaci¨®n en forma de gallinero gigante, y habitado, que el artista Antoni Miralda, muy amante de montajes espectaculares, ha realizado en el patio del palacio de la Virreina como Punto de Encuentro de la trienal Barcelona Art Report.
La instalaci¨®n, que se puede visitar hasta el 2 de septiembre, consta de una jaula de siete metros de altura habilitada como sal¨®n de estar en el que pasean una veintena de gallinas y dos gallos. Los desprevenidos transe¨²ntes que entran en La Virreina, sede del Instituto de Cultura de la ciudad, ponen cara de sorpresa, entre divertidos y asqueados: los animales desprenden un olor de mil demonios.
Hasta la fecha, cuenta Miralda, 'ya son seis las libretas de comentarios que ha generado la obra'. Est¨¢ por ver si se publicar¨¢n. Los responsables de la trienal dicen que 'depende de la cantidad y calidad de las recetas'. Miralda a?ade que 'la idea es publicar una compilaci¨®n de las recetas en un librito o, quiz¨¢s, en una p¨¢gina web del Punto de Encuentro que est¨¢ en proceso de realizaci¨®n'. Sea como sea, el artista que cas¨® el monumento a Col¨®n de Barcelona con la estatua de la Libertad de Nueva York avanza que todos los documentos formar¨¢n parte de un proyecto titulado Egg Dream Museum, una parte del cual se presentar¨¢ a partir del 1 de septiembre en la exposici¨®n sobre El Bosco que se inaugurar¨¢ en Rotterdam.
La intervenci¨®n supone una referencia l¨²dica al origen de la creaci¨®n, aunque alguien ha utilizado el recetario para afear a Miralda que 'la reflexi¨®n es demasiado obvia: somos quiz¨¢ como gallinas'. Los visitantes pueden sentarse en alguna de las cuatro mesas estilo merendero que flanquean la jaula apuntando a los puntos cardinales para consultar las actividades programadas en la trienal. Tambi¨¦n se puede adquirir alguno de los productos que ofrecen una decena de m¨¢quinas de vending: agua, cava, unas bragas, un caf¨¦, una caja de preservativos, unas velas, un huevo fresco... A escasos metros, las paradas del Mercado de la Boqueria. Una conexi¨®n natural.
En las libretas, recetas de todo tipo: huevos revueltos, huevos estrellados, huevos rellenos, tortillas a la catalana, a la espa?ola, a la francesa... Alguno ha ilustrado el proceso y el aspecto de su plato favorito. Otros han ido m¨¢s lejos, se?alando en un dibujo la curiosa similitud entre un huevo frito y un platillo volante. Alguien resume, y no sin raz¨®n: 'Un poco loco, como Barcelona'.
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