Terceto incontenible
Terceto incontenibleEstudio de R. Reti. 'Wiener Schachzeitung', 1928.
Richard Reti (1888-1929) pose¨ªa una imaginaci¨®n creadora de alt¨ªsimo vuelo que, aplicada a la composici¨®n ajedrec¨ªstica, se plasm¨® en obras de imperecedera belleza, cargadas de l¨®gica interior, inmortales. Este trabajo no est¨¢ entre los m¨¢s notables de su autor, pero contiene todas estas virtudes y es, en esencia, una obra maestra. Con torre y caballo de ventaja, las blancas, en apariencia, deben luchar para evitar la derrota, pues es inevitable la coronaci¨®n de uno de los peones negros. Sin embargo, existe un notable procedimiento ganador en el curso del cual las tres ¨²nicas piezas que conserva el blanco act¨²an en estrecha colaboraci¨®n y se vuelven incontenibles. Es evidente que hay que impedir la amenaza 1... b2, de modo que las blancas juegan 1 Ra3!! Ya se ver¨¢ por qu¨¦ esta jugada gana, mientras que 1 R - b3 fracasa. Sigue 1... h2, que parece ganadora. En este instante, sin embargo, comienza a actuar el tr¨ªo infernal: 2 Te8! (aqu¨ª y no a otro lado; una jugada notable) 2... h1=D. Y ahora las negras disponen de una dama, pero est¨¢n perdidas: 3 Ce4 j., Rc2 (la alternativa 3... Rc1 no cambia la soluci¨®n; la retirada a cualquier otra casilla cuesta la dama) / 4 Tc8 j., Rb1 (otra vez ¨²nica por el doble en f2) / 5 Cd2 j., Ra1 / 6 C - b3 j. (¨¦sta es la raz¨®n de que la primera jugada de la soluci¨®n sea 1 Ra3 y no 1 R - b3; esa casilla quedaba reservada al caballo). Y ahora parece que la persecuci¨®n del rey negro ha fracasado, pero no es as¨ª; la jugada 6... Rb1 / 7 Cd2 j., Ra1 / 8 Tc2!! Un golpe impactante; se amenaza 9 Ta2 mate. El resto es un cruel desenlace: 8... De3 j. / 9 Cb3 j., Rb1 / 10 Tb2 mate. Una hermosa creaci¨®n.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.