Felipe V s¨ª gobern¨®

Henry Kamen, un especialista en la historia de Espa?a que ha publicado libros sobre la inquisici¨®n y una biograf¨ªa de Felipe II, acomete en Philip V of Spain (Yale University Press) una biograf¨ªa sobre el fundador de la estirpe de los Borbones. La ascensi¨®n al trono de Felipe V fue un episodio importante en la historia de Espa?a. Carlos II, el ¨²ltimo descendiente de la dinast¨ªa de los Habsburgo que se inici¨® cuando Carlos V hered¨® el trono, muri¨® en 1700 sin dejar herederos, pero dej¨® todas sus posesiones a un nieto de Luis XIV de Francia que tom¨® el t¨ªtulo de Felipe V y fue el primer rey de la dinast¨ªa de los Borbones. Su ascensi¨®n al trono constitu¨ªa una amenaza porque significaba que Francia y Espa?a pod¨ªan llegar a tener un d¨ªa un mismo rey, por lo que los Habsburgo de Austria se aliaron con Inglaterra, Holanda y Portugal para intentar llevar al trono al archiduque Carlos. Felipe V defendi¨® su Corona y mantuvo las posesiones de Espa?a en Am¨¦rica, pero perdi¨® Flandes, territorios en Italia y los ingleses mantuvieron Menorca y Gibraltar. El libro mantiene que Felipe V fue uno de los reyes m¨¢s idiosincr¨¢ticos de Europa y uno de los m¨¢s malentendidos. Pero Kamen afirma tambi¨¦n que Felipe V era un maniaco-depresivo que sufr¨ªa ataques que lo paralizaban, enfermedad probablemente heredada de su madre. A medida que su enfermedad avanzaba, su gobierno se hizo cada vez m¨¢s err¨¢tico, hasta el punto de que no sal¨ªa de la cama durante d¨ªas. Finalmente, en 1724, abdic¨® en favor de su hijo Luis, que muri¨® un a?o despu¨¦s, tras lo cual Felipe V reclam¨® el trono. En 1728 empez¨® a vivir durante la noche y a dormir durante el d¨ªa y recib¨ªa a ministros y embajadores despu¨¦s de la medianoche en sesiones que duraban horas. Kamen contradice la historia convencional de este rey en diversos aspectos. Por ejemplo, ha revisado la literatura m¨¦dica y concluye que Felipe V no estaba loco, sino que sufr¨ªa de un trastorno bipolar. El autor explica que s¨®lo sus dos mujeres, Mar¨ªa Luisa de Saboya primero e Isabel Farnese de Parma despu¨¦s, eran capaces de levantarle el ¨¢nimo, al igual que el castrati Farinelli, cuya voz era capaz de disipar su melancol¨ªa, por lo que estaba al servicio del rey a cualquier hora del d¨ªa o de la noche. Tambi¨¦n argumenta convincentemente que Felipe V siempre gobern¨®, contradiciendo la versi¨®n de que Isabel Farnese era el verdadero poder detr¨¢s del trono.