Mandela: 'El racismo es un mal que mata a m¨¢s gente que cualquier epidemia'
Joschka Fischer asume la responsabilidad de los pa¨ªses ricos en la esclavitud
El ex presidente surafricano, Nelson Mandela, declar¨® ayer en un mensaje televisado a la Conferencia contra el Racismo de Durban (Sur¨¢frica) que 'el racismo es una enfermedad que afecta a la mente y el alma'. 'Mata a m¨¢s gente que cualquier epidemia; deshumaniza a cualquiera que toca. La tragedia es que la cura est¨¢ al alcance de todos, y sin embargo no la hemos tomado', dijo Mandela; quiz¨¢ la persona que mejor encarna la lucha contra el racismo se?al¨® que 'la historia nos ha hecho lo que somos, pero no hay que estar sujetos por ella. Podemos decidir nuestros destinos'.
Mandela, que condujo la transici¨®n de Sur¨¢frica desde el apartheid hacia la democracia multirracial hace una d¨¦cada, no habl¨® personalmente porque est¨¢ siendo sometido a tratamiento contra el c¨¢ncer. Quiso que 'se recuerde esta conferencia como una cumbre en la que toda la humanidad se ha embarcado conscientemente en un nuevo camino'. 'Dejemos que este sea un tiempo en el que se construya el verdadero esp¨ªritu de solidaridad en apoyo a la dignidad humana', dijo.
El secretario general, Kofi Annan, intent¨® durante su intervenci¨®n ante la asamblea defender la conferencia de las cr¨ªticas por la escasa participaci¨®n de jefes de Estado. 'No siempre se puede lograr el quorum que tuvimos al celebrar los 50 a?os de las Naciones Unidas', dijo, agregando que en la mayor¨ªa de las conferencias una participaci¨®n a nivel ministerial era de lo m¨¢s normal. 'No debemos dejar que ning¨²n tema descarrile la conferencia; si no el resto de la humanidad nos har¨¢ responsables de este fracaso', destac¨® Annan. Uno de los problemas que no favorecen el desarrollo de la cumbre es la eliminaci¨®n de algunos temas de la agenda. 'Uno s¨®lo puede lograr la paz con el enemigo y el di¨¢logo es esencial en ese fin', agreg¨®. Nadine Gordimer, la premio Nobel de Literatura surafricana, dijo que duda que la Conferencia 'resuelva el tema del racismo: esa herencia ps¨ªquica, ese prejuicio condicionado contra el otro. Pero podr¨ªa hacer que todos nosotros estemos m¨¢s alertas y podamos examinar bajo la luz nuestras propias actitudes'.
El ministro de Exteriores de Alemania, Joschka Fischer, se convirti¨® en el primer representante del mundo desarrollado en asumir responsabilidades por los efectos de la esclavitud. 'Debemos empezar esta conferencia con el pasado. En muchas partes del mundo el dolor sobre las persistentes consecuencias de la esclavitud y la explotaci¨®n colonial aun sigue siendo profundo', dijo Fischer, el representante de m¨¢s rango de los pa¨ªses ricos presente en Durban. Las injusticias del pasado no pueden ser deshechas. Pero el admitir la culpa, el asumir la responsabilidad y enfrentar las obligaciones hist¨®ricas puede por lo menos devolverle a las v¨ªctimas y sus descendientes la dignidad que les fue robada. Yo quisiera, por lo tanto, hacer esto hoy en nombre de la Republica Federal de Alemania', dijo Fischer. El ministro se quedar¨¢ un d¨ªa m¨¢s de lo planificado para continuar las negociaciones sobre la paz en Oriente Medio, que inici¨® hace unos meses.
Sus palabras entregaron la dosis de optimismo que hac¨ªa falta en esta Conferencia, que ha estado plagada de recriminaciones, sobre todo en lo referente al conflicto ¨¢rabe-israel¨ª. Yasir Arafat volvi¨® a reiterar la demanda de que se obedezca la resoluci¨®n 194 de la ONU que permite el regreso a su patria y sus casas de los palestinos. 'El pueblo palestino enfrenta hoy una campa?a de extrema violencia dirigida por Sharon [primer ministro israel¨ª], que declara al mundo con arrogancia y desaf¨ªo su rechazo a una soluci¨®n pol¨ªtica e insiste en una soluci¨®n militar que no trae m¨¢s que cat¨¢strofes y destrucci¨®n para nuestro pueblo y nuestra tierra', dijo.
Mientras, la delegaci¨®n estadounidense sigue participando a nivel medio en su intento por moderar el lenguaje de la declaraci¨®n final, que deber¨¢ servir para que cada pa¨ªs implante un plan de acci¨®n. El jefe de la delegaci¨®n, el embajador E. Michael Southwick, no se sienta al frente de su delegaci¨®n lo que en el lenguaje no verbal diplom¨¢tico se interpreta como una participaci¨®n a medias. Y la delegaci¨®n israel¨ª intenta frenar la avalancha de publicidad que reciben aqu¨ª las aspiraciones palestinas.
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