Terrorismo com¨²n

En ning¨²n Estado de la Uni¨®n Europea es hoy concebible que se otorgue el estatuto de refugiado pol¨ªtico a miembros de organizaciones armadas acusados de delitos de terrorismo en un pa¨ªs socio. Las reticencias que al respecto ha habido en el pasado, en virtud de un concepto de asilo de fuerte raigambre en suelo europeo, han sido superadas ante la constataci¨®n de la com¨²n realidad democr¨¢tica de todos los miembros de la UE. Pero quedaba por dar un paso crucial en la armonizaci¨®n y la agilizaci¨®n de los procedimientos administrativos y judiciales que permitan la detenci¨®n y la r¨¢pida puesta a disposici¨®n de la justicia de quienes utilizan la violencia contra las personas, la poblaci¨®n en general o las instituciones aduciendo razones pol¨ªticas e ideol¨®gicas plenamente defendibles por cauces legales en el ¨¢mbito de la UE. Ese paso lo dio ayer el Parlamento Europeo.

Bas¨¢ndose en un informe del eurodiputado liberal brit¨¢nico Graham Watson, el Parlamento Europeo ha propuesto al Consejo de Ministros de la UE la adopci¨®n de cuatro medidas b¨¢sicas para un tratamiento com¨²n del fen¨®meno terrorista: una tipificaci¨®n delictiva del terrorismo que sea coincidente (ocho pa¨ªses carecen de legislaci¨®n espec¨ªfica sobre este delito), el establecimiento de una orden europea de busca y captura de terroristas y narcotraficantes que simplifique o elimine el tradicional procedimiento de extradici¨®n (una medida que Espa?a reclama con especial inter¨¦s), el reconocimiento mutuo de resoluciones judiciales en el espacio de la UE y la armonizaci¨®n de las legislaciones nacionales en materia de indemnizaciones a las v¨ªctimas de delitos terroristas.

Espa?a ha puesto especial empe?o, por causa de ETA, en la respuesta com¨²n de la UE a la amenaza terrorista, pero, como se?ala el informe Watson, 'en los ¨²ltimos a?os, todos los pa¨ªses europeos han resultado afectados, de manera directa o indirecta, por estos actos de violencia'. Corresponde al Consejo de Ministros de la UE traducir en medidas concretas las resoluciones del Parlamento Europeo, una tarea en la que Espa?a puede tener un papel relevante durante su presidencia comunitaria en el primer semestre de 2002.