El trato en el SAS

El d¨ªa 10 del pasado mes de junio sufr¨ª un infarto agudo de miocardio. Ese d¨ªa conoc¨ª el Servicio Andaluz de Salud (SAS) por dentro y por fuera. Tambi¨¦n conoc¨ª lo que es profesionalidad, humanidad y la falta de ambas cosas. El 'doctor en Medicina' que estaba de guardia en el Servicio de Urgencias del Centro de Salud de Sanl¨²car la Mayor esa madrugada fue alertado por mi llamada al 061, a las 3.47 horas. Este se?or, al llegar a mi casa, puso su malet¨ªn en el suelo, le explique los s¨ªntomas que sent¨ªa y de la misma forma cogi¨® el malet¨ªn, argumentando que nada pod¨ªa hacer all¨ª y que me esperaba en la ambulancia (esa noche llov¨ªa).

Cuando llegu¨¦ a la misma tuve que preguntar que d¨®nde me met¨ªa, a lo que respondi¨® que abriera la puerta lateral y me sentara en el asiento del acompa?ante. Todo esto con mis lamentaciones por el enorme dolor que sent¨ªa en el brazo izquierdo y en el pecho.

El conductor, tranquilamente, se puso en marcha y no puedo calcular qu¨¦ tiempo tardar¨ªamos en llegar a Sanl¨²car. Lo que es cierto es que lleg¨® a pararse en el sem¨¢foro que estaba en rojo en el paso superior a la entrada de Sanl¨²car (eran las 4.30 de la madrugada) sin que dicho 'doctor' manifestara lo m¨¢s m¨ªnimo. Por no hacer, no tuvo ni la precauci¨®n de darme un comprimido de Cafinitrina, cosa que hizo el doctor del 061 nada m¨¢s hacerse cargo de m¨ª.

?sta es la parte negativa de mi experiencia. ?Cu¨¢l fue la positiva? La aparici¨®n del 061. Recuerdo la frase del m¨¦dico de dicha unidad cuando llegaron: 'Fuera todos, nosotros nos hacemos cargo de ¨¦l'. Verdaderos profesionales y su exquisito trato con el que escribe este p¨²blico agradecimiento. Gracias a su intervenci¨®n y la diligencia y profesionalidad del equipo de guardia de la Unidad de Urgencias de la Ciudad Sanitaria Virgen del Roc¨ªo hoy puedo decir que me encuentro recuperado con el m¨ªnimo da?o, seg¨²n la Unidad de Cardiolog¨ªa de dicho hospital.

Quiero tambi¨¦n expresar mi agradecimiento al personal de la Unidad de Cuidados Intensivos del hospital Duques del Infantado, por el calor humano que transmiten a los pacientes que se encuentran bajo su vigilancia, por el amor con que los tratan y el amor que reflejan sus miradas en cada actuaci¨®n. ?Record¨¢is al paciente que os present¨® a su hijo de cuatro a?os? La misma experiencia y agradecimiento quiero dejar patente al personal de la Unidad de Observaci¨®n del Servicio de Urgencias del hospital Virgen del Roc¨ªo.

A partir de entonces, aunque parezca una herej¨ªa, yo digo que los hombres y mujeres que trabajan en estas unidades son verdaderos ¨¢ngeles y tienen sexo. ?sta es la parte positiva de mi experiencia y, por tal motivo, quiero felicitar al director o gerente de la Ciudad Sanitaria Virgen del Roc¨ªo.

Lo lamentable es que este tipo de tratamiento hospitalario con los pacientes no se haga tambi¨¦n en la medicina ambulatoria, naturalmente, salvando excepciones.