Discapacitados

En su gran mayor¨ªa, los minusv¨¢lidos somos un colectivo de personas con pocos ingresos, que disfrutamos de las Pensiones No Contributivas (PNC). Nuestra econom¨ªa no es para tirar cohetes pero, sin embargo, todo el entorno que rodea al discapacitado: hacer adaptaciones en el propio edificio, en tu propia casa, en el material que utilizas en las acciones m¨¢s cotidianas (mesas, cucharas...), por no hablar del material ortop¨¦dico, superan con mucho nuestro nivel adquisitivo.

No es ¨¦ticamente correcto, por no decir una inmoralidad, que en las tiendas del ramo los precios de los objetos m¨¢s simples, no hablemos de sillas de ruedas con motor porque parece que te vas a comprar el coche ¨²ltimo modelo que anuncia en la televisi¨®n, en cuesti¨®n de dos a?os aumenten en un 200%.

As¨ª, siempre hay que estar dependiendo de subvenciones y de la incertidumbre de que las concedan. Las ortopedias abusan de nuestro colectivo como resultado de todo el entramado que parte del fabricante y pasa por los intermediarios.

El segundo lugar: ten¨ªa verdadera ilusi¨®n en volver a la Alcazaba de M¨¢laga. No tiene ninguna adaptaci¨®n para hacerlo accesible a personas con movilidad reducida o que se desplazan en silla de ruedas ?Por qu¨¦ el castillo s¨ª y la Alcazaba no?.