Manuel Caballero sale por la Puerta del Toro en la feria de Salamanca

Sali¨® el albacete?o Manuel Caballero por la Puerta del Toro porque cort¨® una oreja en cada toro, pero resulta que, una vez en sus manos, hubo protestas. Algunas veces no sabe uno a qu¨¦ carta quedarse. El 'templario' (por aquello del temple) estuvo bien, pecando como viene siendo habitual de mon¨®tono. Pulcro, con seguridad y frialdad. Fiel a s¨ª mismo.

Jesul¨ªn de Ubrique, que iba por delante, tore¨® igualmente aseado a su primero, un manso de Montalvo, divisa que remend¨® la corrida con dos ejemplares, primero y sexto, mansos los dos para no variar. En su segundo, de la divisa titular Torrestrella, se mostr¨® acelerado y para m¨ª que el toro estuvo por encima del matador. Los cuatro toros jerezanos tuvieron alegr¨ªa y nervio. Si Jesul¨ªn hubiera osado sacar a su segundo a los medios, seguramente se lo merienda.

No pas¨® de discreto Eugenio de Mora, para quien, sin suficiente contundencia, se pidi¨® la oreja en el tercero. En ese toro tambi¨¦n 'gan¨®' el animal y en el rajado sexto, que pegaba oleadas buscando una puerta por la que salir, lo intent¨® tesonero por aquello de justificarse.

En resumidas cuentas, que mejor los toros de Torrestrella que sus oponentes, y que los de Montalvo siguieron la triste huella de sus hermanos lidiados el d¨ªa anterior.

Se pic¨® desastrosamente mal, nadie intent¨® hacer la suerte ni medianamente bien y las buenas gentes se mostraban satisfechas m¨¢s por la primera salida a hombros del siglo XXI que por los toros de torrestrella. ?Le digo a usted!...