'Busco conmover a la gente con el humor'
No es una actriz convencional, aunque a ella no le guste este calificativo. Pero sirve para definir la trayectoria art¨ªstica de Virginia Imaz (San Sebasti¨¢n, 1962), una payasa -t¨¦rmino que ella quiere despojar de su aura peyorativa- que huye de los dramas y las comedias del teatro estable y que fund¨® hace varias d¨¦cadas Oihulari Klown. Tras actuar en cerca de un millar de espect¨¢culos de El Circo del Sol en Orlando, Imaz es la protagonista de Bambulo, la adaptaci¨®n teatral que ha realizado Ram¨®n Barea de este perro nacido de la imaginaci¨®n y la pluma de Bernardo Atxaga. Bambulo, que se estren¨® en el Teatro Barakaldo el pasado d¨ªa 12, llegar¨¢ al Arriaga a mediados del pr¨®ximo mes.
Pregunta. ?C¨®mo se siente interpretando a Bambulo? ?Hab¨ªa encarnado alguna vez a un perro?
Respuesta. Bambulo no es un perro al uso, es el esp¨ªritu del perro que habita en la actriz. Como clown he hecho trabajo de t¨®tem, que es cuando el payaso se siente invadido por el esp¨ªritu de un animal. Pero ¨¦ste es el primer espect¨¢culo en el que no soy payasa.
P. ?Y qu¨¦ tal lleva el cambio?
R. Me siento muy c¨®moda con el personaje y trabajando con el equipo. Cuando Txalo [Producciones] me lo propuso, me interes¨® porque era una historia de Bernardo Atxaga y por trabajar con Ram¨®n Barea, que es un animal de teatro y que trata con much¨ªsimo respeto a los actores y actrices. No hubiera aceptado cualquier otro espect¨¢culo, pero esto es teatro de m¨¢scara.
P. ?Por qu¨¦ esa reticencia a interpretar obras de teatro convencionales?
R. No me interesan de momento ese tipo de papeles. Mi apuesta es m¨¢s conmover a la gente con humor, que reproducir un drama o una tragedia; ya hay suficientes dramas en la vida diaria.
P. ?Qu¨¦ aprendi¨® durante los dos a?os y medio que actu¨® en el Circo del Sol?
R. Muchas cosas a nivel personal y profesional. He aprendido a trabajar para 1.600 personas y a trabajar de forma muy disciplinada, porque eramos 200 personas y ten¨ªamos que actuar coordinadamente. He aprendido tambi¨¦n humildad por trabajar con gente joven tan talentosa; excepto los c¨®micos, la media de edad eran 21 a?os. Ha sido un placer y un honor participar en un sue?o as¨ª.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.