La princesa igualitaria
La hermana del Rey de Jordania defiende en Elche la paridad entre hombres y mujeres en una reuni¨®n de la Unesco
A la princesa Basma Bin Talal, hermana del Rey Hussein de Jordania, le sigue un guardaespaldas de ¨¦lite y le acompa?a su asesora. Avanza por un lujoso pasillo. No se trata de una mezquita ni de un palacio oriental, sino de un hotel ilicitano. Bin Talal es miembro del jurado de la Unesco que el pasado mes de mayo otorg¨® los primeros galardones de bien Patrimonio Oral e Inmaterial de la Humanidad, entre los cuales se encontraba el Misteri d'Elx. Estos d¨ªas se re¨²ne junto a otras personalidades mundiales en la ciudad de las palmeras para perfilar los criterios de futuros reconocimientos.
La lista de miembros de la delegaci¨®n es tan larga como variada. En Elche se encuentran Munojat Yulchieva, una cantante de Uzbekist¨¢n (rep¨²blica fronteriza con Afganist¨¢n, la zona m¨¢s caliente del planeta), Hideki Hayhasida, director del Museo Nacional de las Ciencias de Jap¨®n o Hasan M. Al-Naboodah, profesor de los Emiratos ?rabes Unidos, si bien este ¨²ltimo no ha llegado todav¨ªa. Otros ausentes de la reuni¨®n son los tambi¨¦n miembros del jurado Ugn¨¦ Karbalis y Ronald Muwenda, presidente de la rep¨²blica africana de Mali y monarca de Buganda, respectivamente, que han anulado su viaje en el ¨²ltimo momento. El color de las diferentes culturas de la Unesco sigue presente con el subdirector del organismo Mounir Bouchenaki, originario de Argelia, y Noriko Aikawa, directora general de Patrimonio de Jap¨®n.
Hablar con la princesa jordana no es sencillo. Primero se debe consultar a su asesora y tras el consentimiento de ¨¦sta pasar el filtro de su guardaespaldas, un capit¨¢n de las fuerzas armadas jordanas. Bin Talal es, sin embargo, una mujer corriente: viste al estilo occidental, ronda los cuarenta a?os y habla un perfecto ingl¨¦s. Adem¨¢s de ostentar su cargo real y colaborar con la Unesco, es la presidenta de la Fundaci¨®n Jordana de Derechos Humanos y de la Comisi¨®n Nacional Jordana para la Mujer. 'Mi empe?o principal es conseguir igualar el nivel econ¨®mico de hombres y mujeres, facilitando el acceso de las f¨¦minas al mundo laboral', explica Bin Talal. 'Creo que es la mejor manera de que alcancen iguales derechos'.
La princesa se muestra encantada con el paisaje de Elche. 'Me gustan las palmeras, me recuerdan mucho a mi pa¨ªs y en general toda la vegetaci¨®n', afirma. 'En realidad, tenemos muchas cosas en com¨²n', a?ade. Las preguntas sobre la situaci¨®n de Oriente Medio o la crisis de los atentados en Estados Unidos no se permiten. La pol¨ªtica exterior de Jordania se mueve entre delgados hilos y nadie olvida que este pa¨ªs fue el ¨²nico aliado de Sadam Hussein durante la Guerra del Golfo.
Mounir Buchenaki opina que La Festa re¨²ne todas las caracter¨ªsticas para el reconocimiento de Patrimonio Oral e Inmaterial de la Humanidad. 'La gran participaci¨®n popular, su excepcionalidad, haber sido representada durante siglos ...', explica. Buchenaki era director general de Patrimonio de la Unesco cuando el Misteri recibi¨® este galard¨®n.
Goytisolo acu?¨® el t¨¦rmino patrimonio oral en 1996, en un art¨ªculo publicado en EL PA?S. La Unesco recogi¨® la idea e instaur¨® en 2000 un galard¨®n con el mismo nombre. 'La gente tiene la impresi¨®n de que el Patrimonio de la Humanidad es tan s¨®lo piedra muerta', opina Buchenaki. Con estas nuevas candidaturas, a?ade, 'pretendemos defender cultura viva, algo que ya se hace en pa¨ªses como Korea y Jap¨®n'.
Hideki Hayashida se muestra impresionado con la Bas¨ªlica de Santa Mar¨ªa, edificio que acoge la representaci¨®n del drama sacro-l¨ªrico del Misteri. 'Todo es maravilloso', dice el director del Museo de las Ciencias de Jap¨®n, con un rostro de admiraci¨®n calcado al de un turista c¨¢mara en mano de su pa¨ªs.
La delegaci¨®n visit¨® los lugares emblem¨¢ticos de Elche y la Capella del Misteri les dedic¨® una actuaci¨®n. Sin embargo, no pudieron ver la representaci¨®n. El Misteri es cosa de agosto, y en noviembre una vez cada dos a?os, haya turistas o no.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.