M¨¢s servidumbres
Andaluc¨ªa ha quedado para nutrir el grueso de la tropa profesional espa?ola y de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, al tiempo que para albergar las bases de mayor valor estrat¨¦gico de la primera potencia mundial, como es Estados Unidos. Rota y Mor¨®n cobran en estos d¨ªas m¨¢s relevancia internacional que nunca, al constituirse en plataformas privilegiadas del despliegue norteamericano.
El presidente andaluz, Manuel Chaves, ha alzado su voz reclamando, al menos, que el ofrecimiento de dichas bases est¨¦ condicionado a que se conozcan previamente los objetivos. Unas palabras que han quedado severamente lastradas por su actitud anterior en favor de la cesi¨®n de dichos recintos sin ning¨²n pero que valga durante la etapa socialista. En cualquier caso, no deja de ser ¨¦sta una nueva oportunidad para recordar aqu¨ª la especial servidumbre militar que soporta nuestra comunidad, y sin compensaciones espec¨ªficas que valgan, tal y como se pudo comprobar de forma m¨¢s preocupante a¨²n con el submarino nuclear Tireless.
Con esta perspectiva, no es de extra?ar que Izquierda Unida insista a lo largo de esta semana para que se aborden estos asuntos en el Parlamento andaluz, a pesar de considerarse por parte de los socialistas todo ello como una cuesti¨®n meramente internacional, que escapa del marco competencial estrictamente andaluz. Sin embargo, hay asuntos que requieren necesariamente de una presencia o, cuanto menos, una participaci¨®n de la Administraci¨®n auton¨®mica en temas que se enmarcan fuera de nuestras fronteras, pero que tienen una repercusi¨®n directa en los intereses de los que aqu¨ª residen.
Nos referimos a las conversaciones que se espera inicien en estas jornadas los gobiernos de Espa?a y Reino Unido para resolver, de forma definitiva, el contencioso de Gibraltar. Se tratar¨ªa, con estas conversaciones, a desarrollar en Londres, de buscar un nuevo estatus internacional para la colonia, proponi¨¦ndose por parte espa?ola distintas formas de soberan¨ªa compartida. El uso conjunto del aeropuerto podr¨ªa suponer un primer paso para una normalizaci¨®n de las relaciones en las que los municipios vecinos del Campo de Gibraltar tienen mucho que decir, de ah¨ª que no est¨¦ de m¨¢s reivindicar el protagonismo que deben tener los mismos en el nuevo proceso que ahora se abre.
El hecho de que se tenga en cuenta a Andaluc¨ªa en aquellas mesas internacionales en las que se ventilan algunas decisiones que pueden tener una notable trascendencia en su suelo constituye una tesis que a buen seguro suscribir¨ªa el secretario de Organizaci¨®n del PSOE, Jos¨¦ Blanco. Estar¨¢ este lunes en Sevilla, donde mantendr¨¢ un encuentro con la direcci¨®n de su partido en esta comunidad. ?Qui¨¦n sabe si ha sido finalmente el hilo directo que dice haber establecido el alcalde de la capital hispalense y miembro de la ejecutiva regional, Alfredo S¨¢nchez Monteseir¨ªn, con el secretario general, Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, el art¨ªfice de este encuentro?
A partir de ahora, que est¨¦ tranquilo Chaves, porque tendr¨¢ en el alcalde sevillano a un interlocutor directo con el zapaterismo, mientras que el edil trata de situarse bajo el manto protector de Madrid donde, desde luego, observan con desagrado el uso intencionado que se est¨¢ haciendo de una visita a la calle Ferraz fijada con otros fines m¨¢s inocentes.
Conviene adem¨¢s comprobar c¨®mo digiere el movimiento ecologista andaluz el hecho de que uno de sus m¨¢s destacados e hist¨®ricos l¨ªderes, Alfonso del Castillo, posea una vivienda en suelo r¨²stico en la localidad de Chiclana (C¨¢diz). Sorprende la falta de capacidad de autocr¨ªtica, aunque habr¨¢ que esperar a la celebraci¨®n, este fin de semana, de la asamblea de Ecologistas en Acci¨®n de C¨¢diz para confirmar si lo que pregona este colectivo para los dem¨¢s es capaz de aplic¨¢rselo a s¨ª mismo.
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