Enciclopedia
DICHO EN DOS PALABRAS: no es Eco un escritor proteico que escribe (y opina) sobre todo, sino que es un autor que siempre, con non-fiction o con fiction, se ha ocupado de lo mismo; desde Obra abierta hasta Bandolino o a sus trabajos m¨¢s recientes, Experiences on translation o Bibliofilia.
De sus precoces estudios sobre el tomismo ha mantenido siempre una irrefrenable pasi¨®n por el elegante modus ponens ora como principio l¨®gico, ora como principio ¨¦tico (puesto que modus es tambi¨¦n 'una cierta medida', 'dentro de ciertos l¨ªmites'); y yo a?adir¨ªa, como base de su irrenunciable sentido del humor y atenci¨®n al non-sense. Ejemplos se encuentran en Diario m¨ªnimo o en Kant y el ornitorrinco, donde al definir a ese extravagante animal que desaf¨ªa cualquier razonable clasificaci¨®n advierte de que es algo que podr¨ªa parecerse a un pato pero no a una ballena; o en textos de sem¨¢ntica donde abordando la definici¨®n l¨®gica de soltero ('var¨®n, no casado...') excluye de esa categor¨ªa a Tarz¨¢n (antes de conocer a Jane); en su propuesta, de broma, de crear c¨¢tedras universitarias Adynata o Impossibilia (Historia de la rueda en los imperios precolombinos, Historia de la pintura en la isla de Pascua, H¨ªpica azteca...); o en la lecci¨®n con que inaugur¨® este verano en el Guggenheim el curso Semi¨®tica y Museos en donde se refiri¨® a una cr¨®nica medieval (siglo XIII) que daba cuenta de una catedral alemana, la de Colonia creo, donde se encontraba el cr¨¢neo de san Juan Bautista a la edad de 12 a?os.
Preocupado por poner l¨ªmites a la interpretaci¨®n y a la 'semiosis ilimitada' ha tratado siempre y contin¨²a todav¨ªa hoy con verdadero entusiasmo de tax¨®nomo y de detective (como Sherlock Holmes, Charles Sanders Peirce o Guillermo de Baskerville) de redefinir los conceptos. Por eso ha abordado como pocos, en fiction y en non-fiction, el problema, por citar s¨®lo uno, de lo falso. Si lo falso se opone a verdadero, viene a decir, verdadero hay que contrastarlo con aut¨¦ntico..., conceptos que se interdefinen circularmente entre ellos, como en fiction y en non-fiction.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.