'La Conferencia de Paz busca unas reglas de juego para la convivencia'
Jonan Fern¨¢ndez, coordinador general de Elkarri, ultima los preparativos de la Conferencia de Paz que comienza ma?ana. Durante seis meses tratar¨¢ de promover el acercamiento de posiciones de los partidos vascos para as¨ª facilitar un clima de di¨¢logo, tan reclamado por el lehendakari, que propicie soluciones de consenso al problema vasco.
Pregunta. ?Qu¨¦ sentido tiene esta conferencia ahora?
Respuesta. Nuestro diagn¨®stico parte de que todo lo que hacemos en la sociedad vasca est¨¢ dominado por lo que nos divide, mientras que ignoramos lo que nos une. Es bueno hacer un esfuerzo por intentar un acuerdo que plasme lo que nos une.
P. Elkarri estuvo en el Pacto de Lizarra, una iniciativa excluyente. ?C¨®mo ve aquella experiencia con la perspectiva de los dos a?os transcurridos?
'El final de la violencia de ETA ser¨¢ una mezcla; tendr¨¢, de alguna manera, elementos de di¨¢logo'
R. Nosotros asumimos plenamente que estuvimos en Lizarra, una opci¨®n que implicaba riesgos, pero a la que acudimos convencidos de que pod¨ªa contribuir a la paz. Hubo cosas interesantes para el futuro, pero otras pod¨ªan haberse hecho mejor. Tuvo una pluralidad insuficiente y se centr¨® demasiado en los contenidos de la soluci¨®n y no en acordar los caminos para llegar a ella.
P. Ya que alude a pluralidad, ?lograr¨¢ que asistan todos los partidos a su conferencia?
R. Hasta hoy tenemos una disposici¨®n positiva a la participaci¨®n, aunque no una respuesta oficial, por parte del PSE y Batasuna, aunque esta formaci¨®n tendr¨¢ una participaci¨®n cr¨ªtica porque es notoria su desconfianza hacia nuestra trayectoria. Nos falta ultimar un contacto con el PP. Somos conscientes de que este partido desconf¨ªa de esta iniciativa, pero nos proponemos demostrar que las pretensiones de esta conferencia no responden a intereses ocultos.
P. Precise en qu¨¦ va a consistir.
R. Va a tener una parte reservada y otra p¨²blica. La reservada consistir¨¢ en el trabajo de una decena de moderadores que estudiar¨¢n los posibles puntos de consenso. Sin necesidad de convocar a los partidos a reuniones conjuntas, a escenarios no deseados, consultar¨¢n con ellos los borradores de consensos hasta llegar a un texto que tenga la aceptaci¨®n de todos. La parte p¨²blica consistir¨¢ en mesas redondas para crear un clima de reflexi¨®n y debate sobre distintos aspectos de la paz.
P. ?Qu¨¦ funci¨®n tendr¨ªa la conclusi¨®n final?
R. Acordar unos puntos comunes que sean principios de convivencia y reglas de juego que nos ayuden a salir de la crisis actual, sin que eso signifique restar nada a la pluralidad ideol¨®gica ni censurar el pensamiento o la identidad. La opci¨®n ¨®ptima para nosotros ser¨ªa que ese acuerdo abriera alg¨²n proceso de cara al futuro; la m¨ªnima es un acuerdo escrito, un folio.
P. Suponiendo que alcancen todos los partidos alg¨²n acuerdo, ?no tiene la impresi¨®n de que a ETA le importa muy poco lo que decidan?
R. Es muy posible. Pero lo que nos importa ahora es superar la etapa negativa y de tensi¨®n social y personal que han vivido la sociedad y los partidos. ?sta es nuestra idea, muy modesta, porque no creemos que pueda salir un acuerdo de paz ni una soluci¨®n pol¨ªtica.
P. Pero la crispaci¨®n tiene su origen en ETA y la sistem¨¢tica amenaza que ejerce sobre un sector de la poblaci¨®n, y no en la discrepancia pol¨ªtica, l¨®gica y leg¨ªtima, por otro lado.
R. Esto nos plantea el dilema de si la existencia de ETA debe impedir que dialoguemos para que las cosas vayan a mejor. Nuestra conferencia no se dirige a ETA, sino a los partidos y a la sociedad.
P. Los partidos tienen ya su foro, el Parlamento vasco, para dilucidar sus diferencias.
R. Si observ¨¢ramos que nuestra conferencia interfiere o estorba, nos retiraremos. Pero no creemos que ocurra esto; es m¨¢s, es bueno que haya m¨¢s de un canal en un proceso. La mejora de una situaci¨®n como la que vive el Pa¨ªs Vasco nunca depende de una ¨²nica iniciativa o idea.
P. ?Cu¨¢l es su opini¨®n sobre esta ETA, tan autista? Usted, que siempre ha confiado en la posibilidad de una tregua, ?la cree posible ahora?
R. Creo que se trata de un debate no resuelto en ETA ahora. Por otra parte, creo que ETA tendr¨¢ que aceptar, tarde o temprano, que si lo que piensa la mayor¨ªa de la sociedad vasca es el criterio rector para otras cosas, tambi¨¦n lo ser¨¢ para reconocer que esa mayor¨ªa no quiere resolver sus problemas con violencia.
P. Hay dirigentes del PNV que afirman que a ETA hay que derrotarla.
R. ?Qu¨¦ quiere decir eso? En un proceso como ¨¦ste no hay f¨®rmulas de pizarra y el final de la violencia de ETA ser¨¢ una mezcla de cosas; tendr¨¢ de alguna manera cauces y elementos de di¨¢logo. Si no, ?por qu¨¦ el Gobierno espa?ol fue a Suiza durante la tregua para hablar con ETA? No se puede descartar el di¨¢logo como instrumento.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.