El ataque abre la ofensiva de la Alianza
La oposici¨®n no ha recibido todav¨ªa las armas necesarias para transformar esta fuerza de 15.000 hombres
El ataque contra posiciones del r¨¦gimen talib¨¢n en Kabul, Bagram, Kandahar y Jalalabar ha desatado el p¨¢nico entre la poblaci¨®n civil en esos lugares y las esperanzas de la Alianza del Norte, cuyos l¨ªderes dicen estar en disposici¨®n de tomar la capital de Afganist¨¢n. En Fayzabad, la principal ciudad en el territorio controlado por esta coalici¨®n, un portavoz anunci¨® horas antes del inicio de la operaci¨®n que ¨¦sta era inminente, lo que permite deducir que existe una estrecha coordinaci¨®n con Washington. Pero en los ¨²ltimos d¨ªas aqu¨ª no han llegado armas capaces de transformar a estos 15.000 hombres en un Ej¨¦rcito capaz de cambiar el curso de la guerra.
La Alianza del Norte cree que los afganos dar¨¢n r¨¢pidamente la espalda a los talib¨¢n
Si el p¨¢nico desatado anoche en Kabul llevara a la poblaci¨®n a abandonar la ciudad, arrastrando a sus defensores, la conquista resultar¨ªa m¨¢s sencilla, pues los hombres del difunto Masud est¨¢n s¨®lo a 50 kil¨®metros. La muerte de este jefe, asesinado el 9 de septiembre por dos falsos periodistas que resultaron ser dos agentes suicidas, era parte del mismo plan terrorista contra las Torres Gemelas y el Pent¨¢gono, y, posiblemente, la noticia que activ¨® la orden de llevarlas a cabo. Los autores de esos atentados en Nueva York y Washington sab¨ªan bien que Masud era el ¨²nico l¨ªder de la Alianza capaz de derrotar a los talib¨¢n, por eso aqu¨ª piensan que Mohamed Omar y Bin Laden son parte del mismo problema.
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