Reconstruir la izquierda

El hu¨¦sped del dirigente socialista alem¨¢n, Oskar Lafontaine, se topa en la escalera de su casa con una caricatura en la que una gallina dice a otra: 'Me gustar¨ªa saber c¨®mo se llega arriba sin convertirse en un cerdo'. Santesmases recuerda este detalle que bien podr¨ªa presidir la carrera que se ha impuesto en ?tica, pol¨ªtica y utop¨ªa. Si nos representamos a la pol¨ªtica como un 'llegar arriba', al poder, la pregunta es si el precio a pagar es renunciar a la ¨¦tica y a la utop¨ªa, es decir, convertirse en cerdo.

Antonio Santesmases ocupa un lugar especial, quiz¨¢ ¨²nico, dentro de la filosof¨ªa pol¨ªtica espa?ola. La mayor¨ªa de quienes la cultivan hablan de libros, traducciones en gran parte, en tanto que Santesmases, gracias a su formaci¨®n sociol¨®gica y a su militancia pol¨ªtica, parte de acontecimientos vividos que hemos conocido como noticias period¨ªsticas: Mayo del 68, la ca¨ªda del muro de Berl¨ªn, la entrada en la OTAN, la guerra del golfo, los triunfos y derrotas del PSOE, del SPD, votaciones en el Congreso sobre Kosovo, etc¨¦tera. Sobre ellos vierte una reflexi¨®n filos¨®fica que tiene el don de la claridad y de la agudeza.

Dos temas recorren el libro. En primer lugar, la relaci¨®n entre ¨¦tica y pol¨ªtica: ?hay que colocar a la ¨¦tica extramuros de la pol¨ªtica, fuera de ella y contra ella? Este punto lo discute con Javier Muguerza, cuya apuesta decidida por la acci¨®n moral queda desligada de cualquier esperanza en un mundo que reconcilie el ser con el deber-ser. La tensi¨®n irreconciliable entre ¨¦tica y pol¨ªtica est¨¢ servida. La respuesta de Santesmases: si no queremos reducir la pol¨ªtica a brazo largo de la econom¨ªa hay que 'fundamentar la pol¨ªtica en esa utop¨ªa racional de la que habla El¨ªas D¨ªaz'.

El segundo, el futuro de la izquierda. No corren buenos tiempos para el socialismo. La expansi¨®n planetaria del neoliberalismo, el quintacolumnismo de la Tercera V¨ªa, las torpezas del socialismo y el fracaso del comunismo han creado una psicolog¨ªa a la defensiva entre la progres¨ªa m¨¢s af¨ªn a impedir retrocesos que a promover progresos. Santesmases, sin embargo, no se resigna. Invoca la solvencia del proyecto ilustrado, la tradici¨®n laicista, la sensibilidad de los cristianos de la liberaci¨®n; se al¨ªa con los an¨¢lisis de A. Gortz, R. Miliband, P. Glotz, O. Lafontaine, E. D¨ªaz o L. G¨®mez Llorente, para construir un planteamiento que resume as¨ª: 'Personalmente pienso que ni las posiciones vanguardistas ni las electoralistas conducen al socialismo. S¨®lo una estrategia reformista revolucionaria que parta de la cultura pol¨ªtica de las sociedades occidentales, aliada con los nuevos movimientos sociales, es susceptible de conducir al socialismo'.

La fuerza del libro reside en detectar causas concretas a la derrota de la izquierda. Las cosas podr¨ªan haber sido de otra manera y pueden serlo. Este optimismo de la inteligencia contrasta con la posici¨®n de quienes piensan que no hay nada que hacer, aunque haya que seguir intent¨¢ndolo. Se puede llegar arriba, sin convertirse en un cerdo. La duda que asalta al lector, al final del recorrido, es si la cultura triunfante no ha hecho met¨¢stasis en el dolorido cuerpo de la izquierda, lo que obligar¨ªa a repensar no s¨®lo los fracasos sino los ¨¦xitos, los apoyos y hasta las convicciones de la izquierda. La brecha abierta en este libro, al buscar una reconstrucci¨®n de la tradici¨®n emancipatoria deconstruyendo el progreso destructivo, espera ser continuada.