Rivaldo, a mayor presi¨®n, mejor respuesta

Rivaldo no pierde la calma y a la excitaci¨®n de un ambiente caldeado hasta el exceso, a muy pocas horas ya de la temida visita del Valencia al Camp Nou, responde con una calma pasmosa. Nada perturba al delantero brasile?o, como si no fuera ¨¦l quien concitara todas las expectativas de la parroquia cul¨¦, como si no fuera el protagonista del culebr¨®n que desencaden¨® la lesi¨®n que sufri¨® con la selecci¨®n brasile?a o de los silbidos de desaprobaci¨®n durante el partido contra el Olympique de Ly¨®n. Rivaldo cuenta con la ventaja de saber a qu¨¦ se enfrenta, cu¨¢l es el tipo de desgaste al que est¨¢ sometida la figura, el jugador que m¨¢s cobra en un club como el Bar?a. No en vano cumple ya su quinta temporada en el club azulgrana, sabe a qu¨¦ tipo de desgaste psicol¨®gico debe responder y c¨®mo hacerlo, normalmente marcando goles, como los 99 que ha logrado hasta ahora en la Liga espa?ola, 21 de ellos en su primer a?o en ella con el Deportivo.

Pero Rivaldo transmite la sensaci¨®n de no inmutarse ni por el hecho de saberse en el centro del hurac¨¢n ni por la magnitud del desaf¨ªo: repetir su colosal respuesta la pasada anterior en los partidos de m¨¢s alta exigencia. Si se trataba de anotar tres goles en San Siro ante el Milan, all¨ª estaba ¨¦l para materializarlos; si hab¨ªa que salvarse de la campana de una prematura eliminaci¨®n de la Liga de Campeones con otro gol en el campo del Leeds, ¨¦l que levantaba el dedo; si alguien ten¨ªa que marcar ante el Real Madrid, tres veces que enviaba el cuero a la red del Bernab¨¦u, aunque la ¨²ltima fuera anulada; y si, por fin, en la ¨²ltima jornada de Liga, se precisaban otros tres goles para derrotar al Valencia y clasificarse para la Liga de Campeones, los marcaba adorn¨¢ndolos con un ¨²ltimo que ya no fue gol, sino golazo, de chilena y de espaldas a la porter¨ªa de Ca?izares. Era de esperar que el guardameta del Valencia todav¨ªa ayer tratara de evitar el ingrato recuerdo: 'No quiero saber nada de aqu¨¦l partido. Este va a ser un partido totalmente nuevo', dijo Ca?izares seg¨²n informa Juan M.Villalba.

Rivaldo no se inmuta y responde a las cr¨ªticas con goles. Esa es la principal raz¨®n del futbolista estrella. Puede que alrededor de Rivaldo sea dif¨ªcil armar un equipo, pero nadie como el brasile?o para desmontar a un rival. Y, si no , que se lo pregunten al Leeds, el Milan, el Madrid o el Valencia, que regresa ma?ana al Camp Nou. Rivaldo est¨¢ harto de la chachara que se forma alrededor de ¨¦l, y es consciente de que todas sus acciones sobre el c¨¦sped son analizadas con microscopio.

'Se me exige m¨¢s que a los dem¨¢s por todo lo que he conquistado en el f¨²tbol', se?al¨® ayer Rivaldo. 'Los aficionados quieren que decida en cada partido, pero no juego solo. Ya quisiera yo que todos los partidos saliesen bien. A veces los aficionados no tienen paciencia y me critican', a?adi¨®. Y prosigui¨®: 'Para un gran sector de la afici¨®n tengo que ser siempre una m¨¢quina, que nunca falla y eso es imposible. Salgo de una lesi¨®n importantes, la primera como jugador azulgrana, y no estoy a tope. Llegu¨¦ de Brasil enfermo, cansado, pero siempre dispuesto a jugar. Pero cuando llega el partido y no marco pronto, la hinchada se enfada conmigo. Yo, ante todo, asumo esta cr¨ªtica porque la afici¨®n siempre tiene raz¨®n'.

Pese a las cr¨ªticas, Rivaldo no pierde ni su concentraci¨®n ni su profesionalidad. El brasile?o prepara el encuentro ante el Valencia con mucho esmero. Si el jueves, en la jornada festiva para la plantilla, acudi¨® al Camp Nou para someterse a una sesi¨®n de masaje en su rodilla maltrecha por la reciente lesi¨®n, ayer, repiti¨® la sesi¨®n fisioterap¨¦utica. Durante casi dos horas permaneci¨® en la enfermer¨ªa tras el entrenamiento llevado a cabo en el Mini Estadi.

Rivaldo, que hasta ahora s¨®lo ha disputado un partido de Liga esta temporada, en Sevilla, vuelve al Camp Nou en el campeonat, ante el mismo rival, el Valencia, con el que se despidi¨® a lo grande la pasada campa?a. Su tercer gol gol de chilena, permiti¨® al Bar?a clasificarse para la Liga de Campeones. Una escena que Rivaldo recuerda con alegr¨ªa. 'Frank [De Boer] me pas¨® el bal¨®n, lo recog¨ª, pero Djukic no me dejaba espacios, y se me ocurri¨® la chilena por instinto'. Aquel d¨ªa, el estadio azulgrana celebr¨® a lo grande la maravillosa cabriola del brasile?o. Una acrobacia que, seg¨²n Rivaldo, puede realizar 'cualquier futbolista'.