El fiscal solicita el archivo del caso del juez de vigilancia
La decisi¨®n est¨¢ ahora en manos de los magistrados de la Sala de lo Civil y Penal del TSJ
El fiscal jefe, Enrique Beltr¨¢n, comunic¨® ayer su decisi¨®n de solicitar a la Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) el sobreseimiento en el caso Alberola. El fiscal jefe, que se reuni¨® hace poco m¨¢s de una semana con los fiscales coordinadores para abordar la calificaci¨®n en el procedimiento abreviado por supuestos delitos de prevaricaci¨®n y revelaci¨®n de secretos por parte del juez de vigilancia penitenciaria de Castell¨®n y Valencia, Ernesto Alberola, ha entendido que no hay razones para que avance la investigaci¨®n.
El fiscal jefe, Enrique Beltr¨¢n, tard¨® poco m¨¢s de una semana en comunicar al magistrado juez instructor de la Sala de lo Civil y Penal del TSJ su decisi¨®n sobre el caso Alberola tras la reuni¨®n con los cinco fiscales coordinadores. Con fecha del pasado d¨ªa 13, Beltr¨¢n curs¨® la petici¨®n de sobreseimiento del procedimiento abreviado que sigue la sala del TSJ sobre supuestos delitos de prevaricaci¨®n y revelaci¨®n de secretos del juez de vigilancia penitenciaria de Castell¨®n y Valencia, Ernesto Alberola.
El fiscal jefe, como consta en un comunicado hecho p¨²blico ayer, ten¨ªa en su mano la decisi¨®n. 'Al no haber acusaci¨®n particular ni popular, quedaba de mi absoluta incumbencia formular acta de acusaci¨®n, pedir el sobreseimiento o, excepcionalmente, nuevas pruebas', explic¨® Beltr¨¢n. El fiscal jefe convoc¨® la junta de coordinadores y, como explica en la nota, logr¨® el acuerdo un¨¢nime al criterio por ¨¦l defendido. Tras ese acuerdo, y seg¨²n el propio Beltr¨¢n, no era necesario consultar con el fiscal general del Estado. 'No obstante, y para mejor actuar, tuve con ¨¦l un cambio de impresiones en el que, explicado por m¨ª lo actuado y hechas por ¨¦l las preguntas que crey¨® oportunas, confirm¨® mi criterio', se?al¨® Enrique Beltr¨¢n.
Por tanto, el fiscal jefe ha logrado el apoyo de los fiscales hasta el m¨¢s alto nivel a su petici¨®n de sobreseimiento del procedimiento abreviado del que es objeto el juez de vigilancia penitenciaria de Castell¨®n y Valencia. La decisi¨®n est¨¢ ahora en manos de los magistrados de la Sala de lo Civil y Penal del TSJ, en cuyo seno se produjo ya un voto particular sobre el auto de suspensi¨®n de empleo dictado contra el juez Alberola.
Ernesto Alberola se mostr¨® ayer cauto pero satisfecho al conocer la noticia. 'Me alegra saber cu¨¢l ha sido la decisi¨®n del fiscal. Eso demuestra que, como siempre he dicho, nunca ha habido razones para procesarme. He hecho mi trabajo conforme a la legalidad vigente. He aplicado siempre el criterio m¨¢s favorable al penado con lo que la actual normativa permite'.
Alberola, que conf¨ªa en que el TSJ acepte la petici¨®n del fiscal y la decisi¨®n ¨²ltima sea la de sobreseimiento del caso, recuerda que a¨²n est¨¢ pendiente 'desde hace ya a?os y tras pasar todos los ex¨¢menes preceptivos, una nueva ley procesal que marque exactamente en qu¨¦ condiciones espec¨ªficas y concretas debe o no concederse una progresi¨®n de grado o permisos'. Adem¨¢s, el titular del juzgado de Vigilancia de Castell¨®n y Valencia record¨® ayer al conocer la decisi¨®n del fiscal jefe que 'en ning¨²n otro juzgado de vigilancia penitenciaria de Espa?a ocurre que el fiscal de vigilancia penitenciaria recurra absolutamente todo, como pasa aqu¨ª'.
El TSJ debe ahora pronunciarse sobre el caso tras la decisi¨®n del fiscal. Y debe tambi¨¦n responder al recurso presentado por el letrado del magistrado contra el auto que a primeros de septiembre pasado, y con un voto particular, le suspendi¨® de empleo. 'Probablemente si la sala asume el criterio del fiscal, y dado que la suspensi¨®n se deriva de un proceso penal, no haga falta un pronunciamiento expl¨ªcito', indic¨® el juez.
Ernesto Alberola era investigado desde primeros de a?o por un supuesto delito de prevaricaci¨®n y revelaci¨®n de secretos que se inici¨® a ra¨ªz de unas escuchas telef¨®nicas en la investigaci¨®n sobre un crimen en una fundici¨®n de Alaqu¨¤s. El TSJ comunic¨® al juez el auto por el que se iniciaban diligencias previas la pasada primavera. Poco despu¨¦s, esas diligencias previas se convirtieron en procedimiento abreviado -lo que hizo pensar que exist¨ªan indicios suficientes de la comisi¨®n de irregularidades como para seguir adelante con la investigaci¨®n-. Con una divisi¨®n clara en el seno de la Sala, el proceso avanz¨® hasta que a primeros del pasado mes de septiembre el fiscal encargado del caso solicit¨® una serie de pruebas que le fueron negadas. Ello motiv¨® que el fiscal elevara un recurso. Y fue entonces cuando consigui¨® que esas pruebas, fundamentalmente testimoniales, se aceptaran.
En el procedimiento han declarado, entre otros, los funcionarios del juzgado de vigilancia penitenciaria que trabajan con Ernesto Alberola, dos presos de la c¨¢rcel de Picassent, una docena de abogados -algunos de ellos ligados a la defensa habitual de narcotraficantes- y otros profesionales de la carrera judicial. Las pruebas obtenidas no son, seg¨²n el fiscal jefe, suficientes para imputar a Ernesto Alberola.
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