'Nuestra ¨¦poca nos condena a sentirnos vigilados'

Michael Lewis ha sido agente de bolsa antes que escritor. Despu¨¦s de trabajar en Salomon Brothers, en 1998, public¨® El p¨®quer del mentiroso, su primer ¨¦xito de ventas, en el que narraba la historia de la d¨¦cada de 1980 en Wall Street y Londres. Este a?o, ha publicado en Espa?a The New New Thing (Ediciones Pen¨ªnsula), un recorrido por la historia de Silicon Valley de la mano de Jim Clark, fundador de Silicon Graphics y Netscape. En octubre, Documan¨ªa ha estrenado una serie de cuatro episodios titulada El futuro est¨¢ aqu¨ª, un trabajo de Lewis para la BBC en el que se explican los cambios que Internet genera en la vida de la gente.

Colaborador de The New York Times y Bloomberg, desde hace un par de meses, Lewis reside en Berkeley (California). Desde all¨ª respondi¨® por correo electr¨®nico a Ciberp@¨ªs.

Pregunta: ?Por qu¨¦ cree que Internet genera una revoluci¨®n invisible?

Respuesta: Los cambios que ha desencadenado son muy sutiles y ocurren en el interior de las personas. Me lleg¨® a fascinar la gente que usaba Internet para generar nuevas identidades. El programa de televisi¨®n cuenta historias de ni?os que se camuflaban y aparentaban ser personas adultas. Tambi¨¦n es una revoluci¨®n que puedan acceder a determinada informaci¨®n personas que antes no ten¨ªan acceso. Creo que es el principal efecto de Internet y desestabiliza mucho a las ¨¦lites que dependen de su estatus para disponer de un acceso privilegiado a la informaci¨®n.

P.: ?Internet tambi¨¦n le ha cambiado la vida?

R.: La posibilidad de trabajar desde cualquier sitio ha hecho mi vida m¨¢s f¨¢cil. Por otra parte, tambi¨¦n me roba mucho tiempo. Ahora, no paso tanto tiempo leyendo libros o viendo la televisi¨®n.

P.: ?Hasta qu¨¦ punto se ha modificado la forma de trabajar?

R.: Les ha hecho depender menos de su lugar de trabajo. Las grandes compa?¨ªas norteamericanas tienen ahora en Internet la forma de intercambiar conocimientos que permite a los empleados compartir puntos de vista y experiencias. Significa que cualquier empleado, con experiencia y si dispone de un punto de vista, pueda transmitirlo fuera de su empresa con mayor eficacia para su propio beneficio y para el de su organizaci¨®n. Por lo general, la red hace que adquieran m¨¢s valor las personas que de por s¨ª ya son valiosas. Internet es una herramienta implacable para la meritocracia.

P.: Algunos medios de comunicaci¨®n en la red han cerrado por falta de ingresos. ?Es posible que en el futuro sea necesario pagar por la lectura de la prensa digital?

R.: Los anuncios clasificados son la principal fuente de ingresos de los peri¨®dicos. Lo que pagas por el peri¨®dico no cubre el coste de impresi¨®n y la distribuci¨®n. Internet ofrece a los editores un mecanismo de distribuci¨®n m¨¢s eficaz, aunque mina su principal fuente de ingresos. Es posible que un d¨ªa la gente busque los anuncios clasificados en los peri¨®dicos digitales. Entonces, ser¨¢n rentables.

P.: Tras ver su serie de televisi¨®n da la impresi¨®n de que Internet est¨¢ reservado para los j¨®venes.

R.: Por supuesto que no. Pero los j¨®venes son m¨¢s receptivos a cualquier nueva tecnolog¨ªa. Hasta ahora, Internet ha sido, entre otras cosas, un arma en manos de la gente joven en su interminable guerra contra los mayores.

P.: En su libro, Monica Lewinsky dice que despu¨¦s de su experiencia, ya no conf¨ªa en Internet. ?Conf¨ªa usted?

R.: Creo que no muchas personas tienen los problemas de Monica Lewinsky. La mayor¨ªa de la gente no despierta la curiosidad de otras personas, porque no somos lo suficientemente interesantes para que alguien vaya olisqueando por Internet. Sin embargo, la mera posibilidad de que uno pueda ser vulnerable a este tipo de exposici¨®n tiene efectos negativos en la salud mental. Vivimos en una ¨¦poca en la que estamos condenados a sentirnos vigilados.

P.: ?Qu¨¦ empresa puede servir de modelo en Internet?

R.: Posiblemente, el mejor ejemplo de una empresa con ¨¦xito en Internet, en oposici¨®n a las empresas que han usado la red para aumentar su ¨¦xito, de las cuales hay muchos ejemplos, es eBay, la casa de subastas on line.