Un historial m¨¦dico repleto de incidentes

La historia cl¨ªnica de Ronaldo es incre¨ªblemente larga para un atleta que acaba de cumplir 25 a?os. La contractura muscular que congel¨® ayer el estadio de San Siro es, aunque alarmantemente repetido, uno de los inconvenientes menos graves que han afectado al brasile?o. Un verdadero infierno cargado de operaciones, trabajos de rehabilitaci¨®n, tratamientos fisioterap¨¦uticos e interminables periodos sin jugar.

El punto d¨¦bil del brasile?o han sido siempre sus rodillas. En febrero de l996 fue sometido a la primera intervenci¨®n quir¨²rgica, en el tend¨®n rotuliano de la rodilla derecha. Debi¨® parar durante ocho semanas. En julio de 1998 se le diagnostic¨® una tendinitis rotuliana en la rodilla izquierda, pero sigui¨® jugando. Dos meses despu¨¦s le afect¨® nuevamente una tendinitis en la rodilla derecha que le oblig¨® a dejar los campos durante semanas. En noviembre sufri¨® una reca¨ªda de esa misma tendinitis, pero esta vez con una parada mucho m¨¢s prolongado: 12 semanas.

El 21 de noviembre de 1999, en San Siro, y tambi¨¦n ante el Lecce, a los 14 minutos del segundo tiempo, el tend¨®n rotuliano de la rodilla derecha se rompi¨® por segunda vez, por lo que debi¨® ser operado nuevamente. Regres¨® el 12 de abril de 2000 en Roma, contra el Lazio, pero a los seis minutos de estar en el campo el tend¨®n operado se rompi¨® otra vez, por lo que debi¨® someterse a una tercera operaci¨®n. El 19 de agosto, despu¨¦s de realizar la pretemporada con el equipo interista, volvi¨® en un amistoso e, incluso, convirti¨® un gol.

En septiembre disput¨® con el Inter algunos minutos de los partidos de la Copa de la UEFA contra el Brasov de Rumania. En el ¨²ltimo minuto del segundo partido sufri¨® un estiramiento muscular en la pierna derecha que lo oblig¨® a otras cuatro semanas de paro forzoso.

Ayer, despu¨¦s de casi dos a?os de ausencia en el campeonato italiano, Ronaldo regresaba desde el inicio. En San Siro y ante el Lecce; parec¨ªa que el destino le ofrec¨ªa comenzar desde donde se hab¨ªa quedado. S¨®lo 12 minutos dur¨® la ilusi¨®n, una contractura en la parte posterior del muslo izquierdo le devolvi¨® al t¨²nel y a las sombras. Una vez m¨¢s deber¨¢ hacer un gran ejercicio de voluntad para encontrar la luz. Esta vez, dicen, ser¨¢ la buena.