El Gobierno renuncia a su compromiso de formar este a?o a un mill¨®n de espa?oles en Internet

El Gobierno ha renunciado finalmente a iniciar este a?o el plan de alfabetizaci¨®n digital Internet para todos anunciado a principios de a?o y que pretend¨ªa dar una formaci¨®n b¨¢sica en el uso de la Red a un mill¨®n de espa?oles mayores de 16 a?os por a?o de 2001 a 2003. El Ministerio de Ciencia y Tecnolog¨ªa ha declarado desierto el concurso para contratar la realizaci¨®n de esta acci¨®n-con un plazo de ejecuci¨®n de apenas tres meses y 400 millones de pesetas de presupuesto- que fue considerado imposible de cumplir por empresas especializadas en formaci¨®n.

Tras hacerse p¨²blicos los t¨¦rminos del contrato (ver EL PAIS del 1 de octubre de 2001), el ministerio, cuya titular es Anna Birul¨¦s, dej¨® pasar el plazo l¨ªmite que se hab¨ªa marcado a s¨ª mismo para adjudicarlo (principios de octubre). Hasta esta semana no comunic¨® finalmente a las empresas participantes que lo hab¨ªa declarado desierto y que convocar¨ªa pr¨®ximamente otro restringido y modificado para que la acci¨®n se pudiera iniciar ya en 2002, previsiblemente con mayor presupuesto.

La raz¨®n del retraso dada a este peri¨®dico por Concha Mayoral, encargada de llevar a buen puerto el concurso en el ministerio, es que ha resultado muy dif¨ªcil evaluar las ofertas por lo dispares que eran, por lo que se ha optado por hacer una segunda vuelta entre las empresas que resultaron admitidas. La falta de tiempo ha jugado tambi¨¦n un papel, pero no determinante y se espera contar con m¨¢s presupuesto para 2002, aunque sin concretar la cantidad, seg¨²n Mayoral.

Sin embargo, fuentes del sector resaltan que era claramente imposible cumplir lo que ped¨ªa el ministerio en cuanto a plazos y condiciones econ¨®micas y que el abogado del Estado encargado de revisar las propuestas achac¨® la disparidad existente a la falta de claridad de las condiciones del contrato.

Poco claro

La conclusi¨®n de todo este proceso burocr¨¢tico es que el plan de alfabetizaci¨®n digital, pieza fundamental del programa gubernamental Info XXI, se retrasa al menos un a?o y que sigue sin saberse c¨®mo se va a cumplir. Adem¨¢s de la elaboraci¨®n del programa de formaci¨®n, est¨¢n los aspectos de implantaci¨®n y de captaci¨®n de alumnos. Uno de los aspectos m¨¢s confusos es el referente a qui¨¦nes van a dar los cursillos de 15 horas de duraci¨®n, que costar¨¢n unas 3.000 pesetas y c¨®mo se va pagar a estos profesores y a las entidades colaboradoras. La cuota de los alumnos es claramente insuficiente, se?alan los especialistas, para un curso de esta duraci¨®n, con herramientas tecnol¨®gicas, ya que equivale a lo que se cobra por una hora en una academia.La idea del ministerio parece ser contar con profesores de los colegios p¨²blicos, a pesar de que ¨¦stos dependen de las comunidades aut¨®nomas.

Otras acciones del Info XXI, como la referida a la formaci¨®n de empleados en Internet y Ofim¨¢tica, est¨¢ todav¨ªa en la fase de convocatoria de proyectos que no se resolver¨¢ hasta fin de mes.

Por otra parte, el Ministerio de Ciencia y Tecnolog¨ªa consider¨® requisito indispensable incluir el logo del ministerio en todo el material relacionado con actividades de la Semana de la Ciencia para que ¨¦stas pudieran optar a las subvenciones p¨²blicas destinadas a este fin. La Semana de la Ciencia espa?ola, divulgativa, se celebra actualmente y hasta el pr¨®ximo 18 de noviembre en el marco de la Semana Europea de la Ciencia y ha sido coordinada por primera vez por el Gobierno central, a trav¨¦s del citado ministerio.

Seg¨²n un recordatorio enviado a finales de octubre por Ciencia y Tecnolog¨ªa a los organizadores de las diversas actividades, que se han incluido en una p¨¢gina web central (www.mcyt.SemanaC), era indispensable la utilizaci¨®n del logo completo de la semana (que incluye el del ministerio) en las p¨¢ginas de Intenet, los folletos divulgativos y los carteles para poder optar a una subvenci¨®n por parte del ministerio. Se trataba, sin embargo, de una condici¨®n necesaria pero no suficiente para obtener la subvenci¨®n, como han tenido ocasi¨®n de comprobar algunas entidades que no la han conseguido tras cumplir con la publicidad ministerial.