Renfe contesta

En referencia a la carta remitida por Manuel Rinc¨®n Mart¨ªn, publicada el pasado d¨ªa 30 de octubre y titulada 'Cr¨ªtica a Renfe', quisiera aclarar lo siguiente con respecto a la ausencia de material ferroviario para realizar el servicio Sevilla-Guadalcanal y viceversa.

El material ferroviario que opera en esa l¨ªnea, compuesto por automotores diesel, ha sufrido una serie de aver¨ªas encadenadas en las ¨²ltimas semanas, que ha imposibilitado poder sustituirlo por otros trenes de reserva de las mismas caracter¨ªsticas.

La revisi¨®n en talleres que este material ha tenido y est¨¢ teniendo trata de paliar este problema, ya que cuando tenemos que emplear autobuses para transportar a nuestros clientes, debemos pagar el alquiler de este material rodante, que es propiedad de empresas privadas, a las que Renfe solicita la prestaci¨®n del servicio alternativo y como tal lo paga.

Y esto es as¨ª por el compromiso que Renfe, como empresa de transporte, contrae con el cliente cada vez que un viajero compra su billete, entre los cuales aparece el de llevarlo a su destino en medios alternativos si no hay posibilidad de hacerlo en tren.

Pero ocurre que no es siempre posible determinar con antelaci¨®n suficiente qu¨¦ empresa de autobuses vamos a poder contratar para prestar el servicio que no podemos hacer con nuestro material ferroviario.

Estoy de acuerdo con el se?or Manuel Rinc¨®n que lo l¨®gico hubiera sido, si el autob¨²s pertenec¨ªa a una empresa de Dos Hermanas, hacerlos pasar por Santa Justa y no subir a los viajeros en un cercan¨ªas hasta Los Rosales para luego tener que trasbordarlos al autob¨²s.

Pero en ese momento se intent¨® contactar con otras empresas m¨¢s cercanas al itinerario del tren Sevilla-Guadalcanal, para que las molestias del trasbordo fuesen las m¨ªnimas, a la vez que se acoplaba a los viajeros a un tren de cercan¨ªas que en Los Rosales enlazase con el mencionado autob¨²s.

Esta operaci¨®n, siempre dificultada por encontrarnos en fin de semana, se hizo con m¨¢s retraso de lo previsto, por lo que pedimos disculpas al se?or Rinc¨®n Mart¨ªn, al tiempo que aclaramos que lo sucedido no es m¨¢s que la aplicaci¨®n pr¨¢ctica de una atenci¨®n al cliente que siempre nos ha distinguido: lejos de suprimir un servicio por aver¨ªa de uno o de varios trenes, buscamos medios alternativos de transporte para cumplir el compromiso establecido con el cliente.