Pobre desarrollo del portal administracion.es, tres meses despu¨¦s de su lanzamiento

'Un acceso organizado, sencillo y asequible'. As¨ª anunci¨® el ministro Jes¨²s Posada el nacimiento del portal administracion.es. Tres meses despu¨¦s, los invidentes todav¨ªa no pueden acceder y resulta harto complicado localizar la informaci¨®n de los 117 organismos estatales, locales y auton¨®micos que aglutina.

El portal no es m¨¢s que una base de datos que centraliza la informaci¨®n dispersa por las p¨¢ginas web. 'Carece de los criterios b¨¢sicos de navegaci¨®n y de arquitectura de la informaci¨®n. Simplemente han reaprovechado lo que ten¨ªan y lo han volcado sin organizar los contenidos', seg¨²n el dise?ador Javier Ca?ada.

Al depender de responsables distintos, cada sitio tiene una aparencia diferente. El desbarajuste de formatos de textos y tipos de letra pervive, pese a que hayan eliminado las letras may¨²sculas que imped¨ªan la lectura al chocar unas con otras, como pidieron cientos de internautas d¨ªas despu¨¦s de su lanzamiento.

El ministro Posada presentaba el proyecto como el inicio de la 'administraci¨®n electr¨®nica'. Arrancaba con 49 servicios. Tres meses despu¨¦s cuenta con 53. Los responsables del proyecto consideran 'servicios' a la totalidad de prestaciones, sean informativas o transaccionales. As¨ª, la mayor¨ªa son b¨²squedas de informaci¨®n como por ejemplo la oferta de contrataci¨®n p¨²blica o de empleo, el estado de las carreteras o el acceso a la base de datos de la oficina de patentes y marcas.

Escasos servicios 'online'

S¨®lo unos pocos son realmente servicios que se pueden completar por Internet. Y la mayor¨ªa ya estaban disponibles. Por ejemplo, la emisi¨®n de certificados digitales (1999), los tr¨¢mites con Hacienda (1999) o la compra y venta de valores del Tesoro (2000).

Los servicios culturales se limitan a dos: la venta de entradas que ofrecen el BBVA y SCH para visitar La Alhambra y el Museo de Altamira, respectivamente. Y en temas judiciales se limitan a enlazar con el colegio oficial de Registradores de la propiedad.

Los tr¨¢mites con la Seguridad Social, una de las novedades de 2001, son de momento irrealizables. Los mensajes dicen 'imposible por problemas t¨¦cnicos'. El software de autentificaci¨®n que se necesita para cumplimentar la gesti¨®n no se activa pr¨¢cticamente nunca, cuando aseguran que tarda segundos. Eso si tiene la suerte de poseerlo, ya que es imposible descargarlo desde la web. La F¨¢brica Nacional de Moneda y Timbre ha tenido que parar las descargas desde su servidor por falta de ancho de banda, ante el ¨¦xito de la demanda.

El plan Info XXI explica que 'al menos 150 formularios est¨¦n disponibles a finales de 2001'. Queda un mes para terminar el a?o y hay 100. Aunque presenten 113. Y es que nueve de ellos se repiten en diferentes apartados y otros son programas de ayuda para cumplimentarlos. Adem¨¢s, ni siquiera se pueden enviar los formularios por email.

Los idiomas oficiales del Estado brillan por su ausencia. El portal est¨¢ en castellano. Catal¨¢n, gallego y euskera aparecen cuando el enlace lleva a p¨¢ginas de las administraciones locales y auton¨®micas o en las consultas del BOE. 'Los espa?oles queremos que se respeten las lenguas del Estado y pedimos la pluralidad ling¨¹¨ªstica para todas las actuaciones de Info XXI', dijo el senador Varela y Serra de Entesa Catalana de Progr¨¦s a Anna Birul¨¦s, ministra de Ciencia y Tecnolog¨ªa durante su reciente comparecencia en el Senado.

El proyecto cuenta con un presupuesto de 1.000 millones de pesetas para toda la legislatura. El portal llevaba gastados en septiembre casi 400 millones de pesetas. El resto va destinado a infraestructura y a pagar a la empresa que se ha encargado de las tareas inform¨¢ticas. Seg¨²n algunos arquitectos de portales, un presupuesto de m¨¢s de 50 millones ya ser¨ªa abultado.

El portal no sirve ni para administrados ni para administradores. Unos y otros deber¨¢n acudir a otras fuentes, buscadores y servicios privados para encontrar lo que necesitan. Y, lo que a¨²n es peor, no reduce dr¨¢sticamente los plazos burocr¨¢ticos. Aunque uno entre, se siente ante el ordenador, se descargue un impreso y lo rellene (a mano) no tendr¨¢ m¨¢s remedio que acudir a la oficina f¨ªsica y hacer la cola para presentar la solicitud. En definitiva, con administracion.es, el Gobierno ha conseguido digitalizar el 'vuelva usted ma?ana'.