La falta de medios reduce la eficacia de la Ley del Menor

'Cuatro menores detenidos por un robo con intimidaci¨®n en la calle de la Beneficencia'. ?se era el primer enunciado del relato de un suceso ocurrido a ¨²ltima hora del jueves en Valencia. Dos parejas de j¨®venes denunciaron en el ret¨¦n de la polic¨ªa local que hab¨ªan sido v¨ªctimas de un robo con intimidaci¨®n con navajas. Las descripciones fueron suficiente para que los agentes les detuvieran pocas horas despu¨¦s. Los protagonistas del hecho: cuatro j¨®venes de entre 14 y 16 a?os.

?se no es un hecho aislado en la cr¨®nica diaria. Seg¨²n los datos facilitados por la Polic¨ªa Nacional, entre enero y noviembre de este a?o se ha detenido en la Comunidad Valencian un 19,9% m¨¢s de menores que en el pasado a?o, mientras esa cifra es del 0,2% en el conjunto de Espa?a. El incremento valenciano en 2000 fue del 11%.

El 18% de los delitos conocidos son cometidos por menores, que en un n¨²mero importante tienen entre 16 y 18 a?os. En la provincia de Valencia hay al menos 50 menores reincidentes. De ellos, algunos que en dos a?os acumulan 28 detenciones. Y los que menos, han pasado por comisar¨ªa tres veces. Seg¨²n la Fiscal¨ªa de Menores de Valencia, el volumen de asuntos penales ronda los 6.000, con una cifra de detenidos desde el 13 de enero de 1.683.

La realidad de la tramitaci¨®n de causas en las que los menores son autores de delitos no se ajusta, de momento, al esp¨ªritu re-educador de la ley. De una parte, en Valencia existen s¨®lo tres juzgados de Menores. La plantilla de fiscales es de 11 y la de funcionarios de 20 personas. Los expedientes acumulados en Instrucci¨®n antes de que entrara en vigor la nueva ley han provocado un indiscutible retraso que repercute indiscutiblemente en la situaci¨®n del menor. La Fiscal¨ªa de Menores, agente en vela permanente por la mejor situaci¨®n posible de los menores, tiene impedimentos para la encomienda. El texto de la Ley Penal del Menor contribuye a la dilaci¨®n innecesaria de procedimientes porque no hay una sola tipolog¨ªa de magistrado ad hoc para el tema de los menores. El juez de Instrucci¨®n es el competente en los procedimientos de habeas corpus aunque est¨¦ solicitado por menores. El Juez del Juzgado Central de Menores de la Audiencia Nacional es el que tiene capacidades en los procedimientos en materia terrorista.

Todo el aparato judicial est¨¢, en teor¨ªa, dise?ado, junto con los recursos adicionales de las Administraci¨®n de Justicia y de Bienestar Social, para responder a una realidad: la de los menores protagonistas de la delincuencia -sobre todo de hurtos, tirones, robos con intimidaci¨®n, robos de coches y en coches, da?os al mobiliario urbano-. Sin embargo, la realidad que perciben los ciudadanos, los datos que manejan las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, los an¨¢lisis de quienes administran la justicia en este ¨¢mbito y la informaci¨®n de Organizaciones No Gubernamentales est¨¢ lejos de ofrecer un retrato tranquilizador aunque pol¨ªticamente se amortig¨¹e el golpe con pol¨ªticas que vendr¨¢n pero que a¨²n no se conocen.

En la Comunidad existen tres centros de re-educaci¨®n de Menores: Pi Gros, en Castell¨®n, con 26 plazas ocupadas y seis libres a fecha 25 de noviembre; Sant Vicente Ferrer, en Valencia, con 41 plazas ocupadas y 31 libres a la misma fecha; y La Villa, en Alicante, con 28 plazas ocupadas y dos libres. Adem¨¢s del internamiento, est¨¢n en funcionamiento otras f¨®rmulas. En 2001, los menores atendidos en centros de d¨ªa han sido 1.000. Bajo la f¨®rmula de acogimiento familiar la cifra es de 2.700. Por el acogimiento familiar residencial (protecci¨®n) han pasado 1.000. Menores con medidas judiciales en r¨¦gimen medio abierto se contabilizan 180 y con internamiento 100. Lo que eleva la cifra de menores adscritos a una u otra opci¨®n a 4.980, seg¨²n la consejer¨ªa de Bienestar Social, quien se?ala que las plazas disponibles en centros de recepci¨®n son 116; en residencias infantiles, 151; en residencias comarcales, 685, y en residencias juveniles, 179. La ocupaci¨®n en estos centros est¨¢, de media, alrededor del 90%.

La retah¨ªla de posibilidades se antoja insuficiente cuando se aborda la realidad de la delincuencia en menores. Los responsables policiales apuntan a una doble necesidad: la de adecuar los plazos de la ley a lo realmente operativo y a una actuaci¨®n sobre el menor y su entorno m¨¢s integral. La Administraci¨®n se compromete en tiempo futuro a que los recursos que la ley marca como imprescindibles est¨¦n disponibles. Y jueces y fiscales piden tiempo, en su corriente m¨¢s moderada, o se?alan la falta de efectivos humanos y dotaciones materiales, los m¨¢s beligerantes, como explicaci¨®n a la falta de respuesta.