La batalla de cohesi¨®n nacional

Cada d¨ªa parece m¨¢s claro que uno de los campos en los que se est¨¢ produciendo un rifirrafe continuo entre populares y socialistas es en el alcance del Estado de las autonom¨ªas y la pretendida pelea por la cohesi¨®n de Espa?a.

El Partido Popular, y muy especialmente su presidente, Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, identificaron este tema como uno de los grandes cap¨ªtulos pol¨ªticos de la temporada. Seg¨²n su an¨¢lisis, un enfrentamiento en estos asuntos podr¨ªa acentuar las se?as de identidad del PP y producir desgaste al PSOE. Y quiz¨¢s, sospechan algunos militantes populares, preparar el camino a Jaime Mayor Oreja, si fuera finalmente el candidato a la sucesi¨®n.

Los socialistas, que al principio parecieron algo desconcertados por los ataques, les conceden ahora una importancia capital y est¨¢n dispuestos a dar una aut¨¦ntica batalla para impedir que se erosione su imagen de partido capaz de cohesionar a Espa?a.

Los partidos aceptan que la presencia de las comunidades aut¨®nomas en las negociaciones con la UE es de sentido com¨²n. El problema es la f¨®rmula elegida

La discusi¨®n de esta semana, crispada por las virulentas manifestaciones de Aznar, refleja la marcha de la campa?a y las l¨ªneas de ataque y de defensa de cada una de las dos formaciones. Aznar, dispuesto a lanzar todas sus bater¨ªas, y Zapatero, preparado para reivindicar la historia de su partido como el ¨²nico que realmente ha hecho algo en Espa?a desde que empez¨® la democracia para favorecer la cohesi¨®n nacional.

El Partido Socialista quiere hacer calar la idea de que es precisamente Aznar el que est¨¢ poniendo en peligro esa cohesi¨®n al fomentar peri¨®dicamente conflictos territoriales sin sentido y al confundir el debate sobre distintos modelos o maneras de ejercer el poder con la discusi¨®n sobre 'la idea de Espa?a'.

Un pr¨®ximo episodio de esta batalla se plantear¨¢ en torno a la presencia las comunidades aut¨®nomas en las negociaciones y debates de la Uni¨®n Europea.

La conveniencia de que las CC AA est¨¦n presentes en los ¨®rganos de la UE cuando se discutan temas que son de su competencia exclusiva es de sentido com¨²n y ha sido aceptada por todos los grupos pol¨ªticos , incluido, aunque fuera a trancas y barrancas y cuando no ten¨ªa mayor¨ªa absoluta, por el propio PP.

Presencia con sentido com¨²n

No parece inadecuado, por ejemplo, que representantes de Andaluc¨ªa y Galicia hubieran formado parte de la representaci¨®n espa?ola cuando la UE negociaba el acuerdo pesquero con Marruecos. O que un representante de Canarias intervenga en las discusiones sobre los puertos francos.

Otra cosa son las f¨®rmulas que se establezcan para regular esa participaci¨®n. La reclamaci¨®n formulada por el PNV al hilo de la renovaci¨®n del concierto econ¨®mico plantea problemas de otra ¨ªndole. Pretende que el Gobierno vasco dirija directamente las negociaciones que afecten a sus competencias exclusivas, algo que excluye completamente el PP y que tampoco acepta el PSOE.

Los populares no ofrecen, de momento, nada a cambio, mientras que los socialistas han presentado un proyecto de representaci¨®n auton¨®mica. El PSOE admite que no soluciona la reivindicaci¨®n del Gobierno vasco (ni la propia de los nacionalistas catalanes), pero resalta que supone al menos el reconocimiento de que existe un problema que hay que resolver y la oferta de un modelo concreto y perfeccionable.

'?ste va a ser uno de los puntos de fricci¨®n de cualquier Gobierno con las autonom¨ªas, y m¨¢s concretamente con el Pa¨ªs Vasco y Catalu?a, en los pr¨®ximos meses, o quiz¨¢ a?os, y creemos que es irresponsable negarse a ver el problema. Si el Gobierno no hace nada, seremos nosotros quienes iremos dise?ando f¨®rmulas que permitan asegurar la cohesi¨®n interna de Espa?a y de su modelo auton¨®mico', asegura un miembro de la ejecutiva socialista.

Desde el punto de vista del PSOE, hay que encontrar v¨ªas que respeten la Constituci¨®n y, al mismo tiempo, est¨¦n abiertas a los cambios que se produzcan en la futura configuraci¨®n de la UE y en la aplicaci¨®n m¨¢s rigurosa del principio de subsidiariedad, reclamado por Alemania, un Estado federal.

El deseo de tantear el potencial de estas propuestas llev¨® esta semana a Rodr¨ªguez Zapatero a mantener dos conversaciones telef¨®nicas con el lehendakari, Juan Jos¨¦ Ibarrexte. Los contactos entre los dos pol¨ªticos no han sido hasta ahora muy frecuentes y las conversaciones se desarrollaron en tono cordial, pero sin mucho contenido. Se supone que a partir de ma?ana se intentar¨¢ fijar fecha para una reuni¨®n entre el responsable de la pol¨ªtica econ¨®mica del PSOE, Jordi Sevilla, y la vicelehendakari Idoia Zenarruzabeitia para explicarle porqu¨¦ los socialistas votar¨¢n a favor de la pr¨®rroga del concierto y discutir posibles opciones intermedias.