500 ancianos de Pamplona podr¨¢n comer a diario en clubes de jubilados por 3,16 euros

El pr¨®ximo 7 de enero de 2002, a modo de novedoso regalo asistencial de Navidad para los ancianos de Pamplona, se pondr¨¢ en marcha en la capital navarra un servicio de comedores sociales para mayores de 65 a?os a precios m¨¢ximos subvencionados de 525 pesetas (3,16 euros) por comida y con capacidad para 500 comensales diarios.La Fundaci¨®n Caja Navarra, el Gobierno foral y el Ayuntamiento de Pamplona han coordinado esfuerzos para atender una necesidad que iba en aumento.

Hac¨ªa bastante tiempo que los servicios sociales de base hab¨ªan constatado la existencia de ancianos con problemas para hacer sus propias compras y cocinar su comida debido a circunstancias como una movilidad reducida, falta de conocimientos culinarios, edad avanzada o pensiones muy bajas, entre otros. Esas situaciones desembocaban en cuadros de malnutrici¨®n y enfermedades derivadas de una dieta alimenticia inadecuada y pobre.

El sistema de choque para remediar este problema ha venido por la v¨ªa de un novedoso convenio institucional que permitir¨¢ convertir en comedores asistenciales, cada mediod¨ªa de lunes a viernes, los salones de clubes de jubilados repartidos por distintas ¨¢reas de Pamplona.

En un primer momento, la experiencia piloto se pondr¨¢ en marcha en los clubes de jubilados de Larrabide, Goroabe, Ensanche y Casco Viejo, las zonas de la ciudad donde est¨¢ censada la mayor parte de la poblaci¨®n anciana de Pamplona, subraya Javier Castej¨®n, director de la Fundaci¨®n Caja Navarra. El servicio se prestar¨¢ de lunes a viernes durante todo el a?o, aunque los meses de julio, agosto y septiembre se centralizar¨¢ en un solo local.

El 'ambicioso programa', en palabras de la alcaldesa, Yolanda Barcina, cubrir¨¢ dos servicios en uno: alimentaci¨®n de calidad y la compa?¨ªa humana para muchos ancianos que, adem¨¢s, viven en soledad y, a partir de ahora, disfrutar¨¢n diariamente de una perfecta excusa para relacionarse con otras personas en un acto tan eminentemente social como es el comer.

Para poder acogerse al servicio subvencionado, los ancianos deber¨¢n acreditar ante los servicios sociales de base que poseen pensiones iguales o inferiores al Salario M¨ªnimo Interprofesional (SMI). Si quieren usar el servicio un d¨ªa concreto, deber¨¢n reservar su plaza con dos d¨ªas de antelaci¨®n. Si quieren utilizar el servicio de forma continuada, podr¨¢n inscribirse por un plazo de un mes y, si lo quieren frecuentar de forma permanente, s¨®lo tendr¨¢n que renovar mensualmente su plaza. El nuevo servicio lo prestar¨¢n profesionales de hosteler¨ªa y empresas de catering coordinados por dietistas, que dise?ar¨¢n las comidas diarias. Los propios empleados de cada club de jubilados atender¨¢n el servicio.