Espa?a se prepara para afrontar la misi¨®n m¨¢s arriesgada desde 1992

El ministro de Defensa, Federico Trillo-Figueroa, ha pedido su comparencia urgente en el Congreso para informar de la contribuci¨®n espa?ola a la fuerza de seguridad para Afganist¨¢n. Est¨¢ previsto que dicha comparecencia se produzca el pr¨®ximo mi¨¦rcoles, tras la reuni¨®n que los ministros de Defensa de la OTAN mantendr¨¢n en Bruselas el lunes y martes. Para esa fecha ya deber¨ªa contarse con un mandato del Consejo de Seguridad de la ONU que fije las caracter¨ªsticas y duraci¨®n de la misi¨®n. Los responsables de Defensa no ocultan que se trata de la operaci¨®n m¨¢s arriesgada asumida por las Fuerzas Armadas espa?olas desde que, hace casi un d¨¦cada, en 1992, la primera agrupaci¨®n de la Legi¨®n se despleg¨® en los Balcanes. Por primera vez, adem¨¢s, el Ej¨¦rcito se enfrenta al reto de mantener simult¨¢neamente tres contingentes: en Bosnia-Herzegovina, Kosovo y Afganist¨¢n.

Espa?a se ha mostrado dispuesta a aportar hasta un 10% de la fuerza total, integrada por 3.500 a 5.000 efectivos. Los planes del Estado Mayor Conjunto prev¨¦n el env¨ªo de un batall¨®n reducido de unos 500 soldados, integrado por una compa?¨ªa de Infanter¨ªa de Marina y una o dos compa?¨ªas de Infanter¨ªa Ligera. Aunque a¨²n no hay decisi¨®n definitiva, la propuesta del Ej¨¦rcito de Tierra es que estas ¨²ltimas procedan de la Brigada de Cazadores de Monta?a de Jaca (Huesca).

El mando de la agrupaci¨®n espa?ola lo ostentar¨¢ un coronel o, si ello no fuera posible, un teniente coronel del Ej¨¦rcito de Tierra. El coste de la operaci¨®n se cifra en unos 2.000 millones de pesetas al trimestre, aunque se da por seguro que la misi¨®n ser¨¢ prorrogada al t¨¦rmino de este periodo. A ello hay que sumar el traslado hasta la zona, que es el aspecto m¨¢s complejo de la operaci¨®n. Si EE UU no facilitara sus grandes aviones de transporte habr¨ªa que recurrir probablemente a fletar aviones comerciales.

El traslado se complica por el prop¨®sito de que las tropas espa?olas vayan equipadas con blindados sobre ruedas (BMR) para asegurar su protecci¨®n. Aunque se trata de una fuerza de seguridad, se la dotar¨¢ de armamento de guerra (incluidos misiles contracarro) para repeler cualquier agresi¨®n.

Fuentes diplom¨¢ticas se muestran partidarias de que la resoluci¨®n del Consejo de Seguridad se base en el Cap¨ªtulo VII de la Carta de Naciones Unidas, que permite el uso de la fuerza para cumplir la misi¨®n.

Estos detalles fueron discutidos ayer en Londres por los mandos militares de los pa¨ªses dispuestos a participar en la operaci¨®n. El general brit¨¢nico John McColl, que previsiblemente ser¨¢ el jefe de la fuerza, visitar¨¢ Kabul este fin de semana para estudiar la situaci¨®n sobre el terreno. Los primeros militares espa?oles podr¨ªan llegar a Afganist¨¢n antes de final de a?o para preparar el alojamiento al grueso de las tropas, que viajar¨ªa a principios de enero.

La contribuci¨®n espa?ola deber¨ªa ser aprobada en el pr¨®ximo Consejo de Ministros, que ayer dio luz verde a la participaci¨®n de 13 aviones de transporte (cinco C-130 y ocho CN-235), con un m¨¢ximo de 190 soldados, en el puente a¨¦reo de ayuda humanitaria a Afganist¨¢n.