Apag¨®n y caos
Los servicios meteorol¨®gicos ven¨ªan advirtiendo desde hace d¨ªas de que el fin de semana ser¨ªa duro en Catalu?a y en otras partes de Espa?a porque se acercaba una ola de fr¨ªo polar. Vanas predicciones. El temporal de fr¨ªo y nieve que desde el pasado viernes azota Catalu?a, y que amenaza a otras comunidades, caus¨® un gran apag¨®n en Barcelona y un bloqueo de las comunicaciones que dej¨® una buena parte del territorio incomunicado.
M¨¢s de 30 carreteras cortadas, incluidas todas las v¨ªas de acceso a Catalu?a; varias l¨ªneas de tren paralizadas, y m¨¢s de 2.000 personas refugiadas en polideportivos o en sus propios veh¨ªculos atrapados en alguna cuneta. Los ciudadanos de Barcelona quedaron, una vez m¨¢s, abandonados a la suerte del monopolio de Endesa. Un gran apag¨®n dej¨® a m¨¢s de un mill¨®n de personas sin luz durante m¨¢s de tres horas. Ayer todav¨ªa permanec¨ªan 30.000 ciudadanos sin fluido el¨¦ctrico.
A primera hora de la tarde del viernes, la ciudad se apag¨®, con parte del ¨¢rea metropolitana: los metros se pararon, los sem¨¢foros se bloquearon, las casas se quedaron sin fluido, muchos ascensores quedaron colapsados y la propia sede de la compa?¨ªa el¨¦ctrica, que se hab¨ªa declarado por la ma?ana preparada para lo que viniera, se qued¨® sin luz. El Gobierno catal¨¢n tuvo que alquilar un generador para garantizar el suministro en el Palau de la Generalitat.
Las deficiencias de suministro el¨¦ctrico en Catalu?a son m¨¢s que alarmantes: en invierno, porque hace fr¨ªo, y en verano, por el aire acondicionado. Recientemente, el Gobierno catal¨¢n hab¨ªa amonestado a la compa?¨ªa el¨¦ctrica, decretando que mejorase sus l¨ªneas de suministro y estableciendo un plan de sanciones en caso de incumplimiento. La compa?¨ªa respondi¨® desafiante advirtiendo de que no actuar¨ªa sin compensaciones. La debilidad del Gobierno de Pujol ante Endesa, que act¨²a en r¨¦gimen de monopolio en Catalu?a tras la fusi¨®n-absorci¨®n de las tres el¨¦ctricas hist¨®ricas, Fecsa, Enher e Hidru?a, es elocuente. Esta debilidad contrasta con la dureza empleada el pasado verano contra el municipio de Llagostera, que se negaba a aceptar el trazado de una l¨ªnea de alta tensi¨®n.
El caos de servicios y comunicaciones que est¨¢ viviendo Catalu?a ha puesto tambi¨¦n al descubierto la incapacidad del Gobierno catal¨¢n para tomar medidas preventivas y contar con equipos especiales ante un temporal anunciado. La Generalitat no parece tener otro recurso que el de alertar a los ciudadanos, y rega?arles despu¨¦s por no haber obedecido. A la vista de lo ocurrido, ha quedado claro que la Administraci¨®n no controla un servicio p¨²blico, aunque sea propiedad privada, como el suministro de electricidad, y que tampoco dispone de la organizaci¨®n y los equipos necesarios para este tipo de emergencias. Peor, imposible.
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